Rosario, con dos home runs, pone a los Braves a un triunfo de la Serie Mundial

El 9-2 ante los Dodgers coloca la eliminatoria al mejor de siete con un 3-1

Los angelinos tienen que llevarse tres partidos seguidos para eliminar a Atlanta, algo que ya hicieron el año pasado

Eddie Rosario, de los Atlanta Braves.

Eddie Rosario, de los Atlanta Braves. / Twitter / MLB

EFE / Los Ángeles

El guardabosques puertorriqueño Eddie Rosario pegó un par de home runs y terminó con cuatro carreras remolcadas, llevando este miércoles a los Atlanta Braves a un triunfo por paliza de 9-2 sobre Los Angeles Dodgers, dejándolos a solo una victoria para obtener su pase a la Serie Mundial. La victoria permite a los Braves conseguir ventaja de 3-1 en la serie de Campeonato de la Liga Nacional que se juega al mejor de siete, por lo que un triunfo más y conseguirán el derecho de jugar el Clásico de Otoño. El quinto partido se llevará a cabo mañana, jueves, en el campo de los Dodgers. Ninguno de los dos equipos ha anunciado a sus lanzadores abridores.

El partido pone a los Bravos a una victoria de su primer banderín en 22 años y los campeones defensores de la Serie Mundial enfrentan la eliminación. El año pasado, los Dodgers perdieron 0-2 y 1-3 contra los Braves en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional antes de remontar ganando tres partidos consecutivos y reclamar el banderín en un sitio neutral en Arlington (Texas).

Rosario (2) inició el castigo contra los Dodgers en el segundo episodio, conectando de cuatro esquinas contra el lanzador estelar de la novena de Los Ángeles, el zurdo mexicano Julio Urías. El boricua hizo volar la pelota 115 metros sobre la barda entre los jardines izquierdo y central, sin corredores por delante. En la novena entrada selló con broche de oro al pegar otro bambinazo de vuelta completa, esta vez con dos hombres en circulación. El segundo cuadrangular de Rosario voló 112 metros sobre la barda del jardín derecho, y mandó a la registradora al primera base Freddie Freeman y al segunda base curazoleño Ozzie Albies. Rosario, que pego casi perfecto al irse de 5-4, y que empujó cuatro carreras y anotó tres, jonroneó contra los lanzamientos del cerrador Tony Gonsolin.

En el tercer episodio el guardabosques Joc Pederson pegó un sencillo y remolcó a la goma del home a Rosario, que logró su segundo partido de la serie con al menos cuatro imparables. El boricua se convirtió en el primer jugador en tener dos partidos de cuatro imparables en una Serie de Campeonato de Liga. Rosario impulsó cuatro carreras y terminó a un doble de haber completado el ciclo de bateo. El toletero puertorriqueño pegó cuadrangular en el segundo episodio, triple en el tercero, sencillo en el quinto y home run de tres carreras en el noveno. El guardabosques ha pegado de hit en todos los partidos de esta postemporada, acumulando 14 imparables hasta el momento, y se ha ponchado solo una vez.

Albies pegó una vez en cuatro oportunidades con el tolete y anotó dos veces, una con el home run de Rosario, y otra en el quinto episodio con un volado de sacrificio del guardabosques Adam Duvall. Sobre el montículo, el triunfo se lo acreditó el relevo Drew Smyly (1-0) en tres episodios y un tercio.

Los cuatro vuelacercas de los Braves empataron un récord de franquicia de postemporada. Rosario conectó en el segundo episodio y Adam Duvall lo siguió con otro vuelacercas y es la primera vez que los Braves pegan home runs consecutivos en la postemporada desde el 3 de octubre del 2002 contra los San Francisco Giants en el segundo partido de la Serie Divisional de la Liga Nacional.

Por los Dodgers el bateador emergente, el dominicano Albert Pujols, estuvo perfecto al pegar 1 de 1. La derrota la cargó Urías (0-1) en cinco episodios al recibir castigo de ocho imparables, tres cuadrangulares y cinco carreras, regaló dos pasaportes y ponchó a tres bateadores rivales, confirmando que ha entrado en su peor racha de juego en lo que va de competición. El ganador de 20 juegos, quien permitió tres home runs en solo dos entradas y dos tercios, suma su segunda vez que permite tanto castigo en su carrera; la primera vez fue en su segundo partido de Grandes Ligas en 2016. Urías comenzó con dos días de descanso, después de haber lanzado una entrada de relevo en el Segundo Partido en Atlanta.