Celebración 'interruptus' del PSG

Alves se lamenta en el Parque de los Príncipes

Alves se lamenta en el Parque de los Príncipes / AFP

Albert Gracia

Tocará esperar una semana más. La afición entró al Parque de los Príncipes con la certeza de ‘levantar’ la Ligue 1 y fue el Estrasburgo el que ‘levantó’ la celebración parisina. Parecía que con el empate del Lille el PSG se haría con un título que ganó prácticamente desde la primera jornada. Aun así, el cuadro de Tuchel no pudo con un Estrasburgo que incluso le dio la vuelta al marcador. La afición parisina celebró el título antes de hora y lo terminó pagando caro. Es cuestión de tiempo.

Tuchel quiso ir de sobrado dejando a Mbappé y Draxler en el banquillo. El plan era claro: intentar doblegar al Estrasburgo en la primera mitad y si no era posible tirar de los dos cracks para poder celebrar el título lo antes posible. Con esa intención saltó el PSG al césped. La posesión fue un absoluto monopolio parisino y su superioridad se vio rápidamente recompensada. Ni quince minutos tardó el cuadro de Tuchel en ponerse por delante en el marcador. 

Choupo-Moting hizo bueno un centro medido de Dagba para abrir la lata. El Parque de los Príncipes estalló de alegría. Con ese resultado, el PSG ya era virtualmente campeón de la Ligue 1. Con el marcador favorable, el cuadro parisino se relajó y el Estrasburgo fue ganando enteros en el encuentro. Sin tener el dominio de la posesión, el cuadro visitante sí gozó de buenas aproximaciones hasta que convirtió la euforia en las gradas e desolación. Da Costa y Gonçalves, en apenas ocho minutos, se encargaron de aguar la fiesta improvisada que había montado la afición parisina. Tocaba lavar la imagen del equipo en la segunda mitad. 

Mbappé y Draxler salieron a escena

En la reanudación, Tuchel decidió quemar todas sus naves. Decíamos que el germano había ideado un plan si el partido se torzía. Pues ese plan se puso en marcha. Mbappé y Draxler salieron con todavía media hora por delante a intentar hacer lo que no había hecho el PSG en toda la primera mitad. Con los dos cracks el conjunto parisino fue claramente a más. Nkunku pudo anotar el tanto del empate pero Choupo-Moting, para desesperación de la grada, lo evitó en el último instante. 

El PSG siguió con su acoso hasta que encontró su merecido premio. Kehrer, seis minutos después de entrar y a la salida de un córner botado por Draxler, puso las tablasc. Todavía quedaba tiempo para apelar a la épica. Una épica que no llegó. Y no fue porque no lo intentó Mbappé. El crack francés lo intentó por tierra, mar y aire pero el PSG tendrá que esperar hasta la próxima jornada.