Los deberes de la selección española ante Costa de Marfil

El problema más evidente del equipo de De la Fuente es la falta de gol; solo ha marcado dos goles en 17 chuts a portería

Menos en la primera parte frente a Australia, Pedri no está deslumbrando como hizo la Eurocopa

La carga de partidos condiciona a Pedri

La carga de partidos condiciona a Pedri / EFE

EFE

España logró el pase a los cuartos de final como primera de grupo tras empatar contra Argentina (1-1), en un partido en el que se vivió en el alambre y en el que se repitieron problemas que han hecho que los de Luis de la Fuente hayan sufrido más de lo esperado para lograr la clasificación.

El más evidente es la falta de gol, y el propio técnico lo reconoció en la rueda de prensa posterior al encuentro: "Son datos objetivos que reflejan que nos cuesta mucho concretar las ocasiones, pero también dicen que somos el equipo que más llega al área rival. No aprovechamos la producción ofensiva, pero todo es un proceso de estar más finos", dijo.

Esos datos son que España ha logrado dos goles en 42 disparos, 17 de ellos a portería, en lo que llevamos de Juegos Olímpicos. Es decir, logra anotar el 4,76 por 100 de los tiros que ha realizado contra Egipto, Australia y Argentina.

Sin ir más lejos, el martes contra la albiceleste Mikel Oyarzabal en dos ocasiones y Dani Olmo en otra mandaron fuera ocasiones en las que sus compañeros ya cantaban el gol. Y ahí estuvo la diferencia entre vivir tranquilos el final del encuentro o sufrir como hicieron tras el empate a uno de Tomás Belmonte en el minuto 87.

EMPATES

Un acierto de cara a puerta que se agudiza en las primeras partes, donde si se suma la última generación sub'21, de la que siete jugadores están en los Juegos Olímpicos, y los tres partidos del torneo, acumulan 14 empates a cero al descanso de forma consecutiva.

Y a pesar de esto, España está entre las favoritas. Por su juego y porque hace de la solidez defensiva, uno de los pilares de los equipos que construye Luis de la Fuente, un arte. Solo Argentina ha logrado superar a Unai Simón, en una jugada a balón parado.

Pero ahora le llega un gran reto como es Costa de Marfil. Con Brasil como primera de grupo y a pesar de la historia que tiene Alemania, el duelo de cuartos frente a la selección africana ya alertaba al vestuario antes de que se confirmara.

RETO MAYÚSCULO

En unos Juegos Olímpicos en los que solo Japón ha logrado pleno de puntos basando su fútbol en la condición física y en conocer mejor que nadie la climatología, Costa de Marfil supone un reto mayúsculo para una España que aún está en "pretemporada".

Y mirando los precedentes, se confirma. Los equipos de África han firmado buenas participaciones desde que el torneo de fútbol es sub'23, este año sub'24 por el aplazamiento debido a la pandemia del coronavirus, en Barcelona'92.

Nigeria suma un oro, una plata y un bronce. Camerún un oro y Ghana un tercer puesto. Cotas que cuando se trata de mundiales no están acostumbradas a alcanzar al igualarse la diferencia en el físico.

Dejando atrás Sapporo y su estadio cerrado a 22 grados centígrados constantes, España ya sabe bien lo que es el calor y la humedad de Japón tras el duelo frente a Argentina en Saitama. Los cuartos, en Miyagi, supondrán otro reto para el que seguro ayudará si se encuentra la mejor versión de Pedri.

EL FACTOR PEDRI

Quitando los primeros 45 minutos frente a Australia, el futbolista del Barcelona no está deslumbrando en los Juegos Olímpicos como sí lo hiciera en la Eurocopa, en la que a sus 18 años fue nombrado mejor jugador joven del torneo.

Contra Argentina no logró entrar en constante contacto con la pelota, aunque no se dejó ni un ápice de esfuerzo ayudando en la recuperación de balón, otra de sus grandes virtudes a pesar de que brille en la ofensiva. "No estoy cansado", dijo a los medios presentes en Saitama, entre los que se encontraba EFE, tras pasar a cuartos.

Sí dejó la sensación de que su cabeza, su imaginación, iba más rápido que sus pies. Ya le pasó contra Australia en pases que solo se le ocurrían a él, pero que no lograban llegar a su destino.

Recuperar su magia en una lucha en el centro del campo entre el físico y el buen trato de balón será clave para las aspiraciones de España de entrar en semifinales y estar a un paso de asegurar la medalla que se lleva persiguiendo desde que lograse la clasificación ganando el Europeo sub'21 en 2019.