Stuani y Borja le dan otra alegría al Girona

El Girona suma y sigue. Vive seguramente todavía lejos de la mejor versión de una plantilla que, sobre el paper, tiene un potencial enorme. Pero continúa sumando puntos y con Pep Lluís Martí en el banquillo, la historia es otra. Ayer, le bastaron los destellos de calidad de Cristhian Stuani y Borja García, dos de los futbolistas más desequilibrantes de la categoría, para despachar al Fuenlabrada.

Son ya cinco las jornadas que se acumulan sin perder, una dinámica que deja al equipo en puestos de promoción, muy cerca del ascenso directo. La emoción, el ritmo y las ocasiones se hicieron de rogar. El primer tiempo fue más que aburrido, con apenas llegadas. Demasiado respeto, pocas ideas en ataque y muchas imprecisiones. El paso por vestuarios animó el panorama y tras el descanso aparecieron los goles.

Antes tuvo que entrar Borja García en el campo. Sentó a un desaparecido Samu Sáiz, titular junto a un Gallar que, también invisible, dejó su sitio a Jonatan Soriano. Con ambos en el césped la cosa cambió. El 10 se sacó de la chistera un pase al primer toque para que Stuani, en el área, burlara a un defensa y superara a Biel Ribas en el 61.

Tuvo que esperar Montilivi hasta el tramo final para respirar aliviado. No apretó en exceso el Fuenlabrada, pero buscó el gol del empate sin suerte. Se cerró el Girona, que defendió muy bien con dos y tres centrales, y finiquitó la contienda en una rápida acción de ataque. Borja vio la entrada de Soriano, que la dejó para que Stuani, otra vez, sumara otro tanto en su cuenta particular.