El fútbol argentino, de luto por el asesinato de Lucas González

Se trata de un joven jugador de 17 años que falleció tiroteado por la policía

Lucas salía de entrenar de las instalaciones de Barracas Central, su club, cuando fue abatido

Lucas González, el jugador asesinado

Lucas González, el jugador asesinado / As Argentina

Vero Brunati

Vero Brunati

Murió Lucas González, un futbolista de 17 que fue baleado por la policía cuando salía de entrenar de su club, Barracas Central, el cual es presidido por Claudio Tapia, el mandamás de la AFA . Los clubes de fútbol y la sociedad se unieron en el reclamo de justicia.

Lucas González era un futbolista de 17 años que jugaba en las inferiores de Barracas Central. Y el día miércoles, tres policías vestidos de civil dispararon contra el auto en el que viajaba con otros tres compañeros. Dos balas impactaron en la cabeza del futbolista, causándole muerte cerebral. El joven estaba ilusionado con jugar en primera división, ya que su equipo va a disputar el lunes la final contra Tigre por la definición del primer ascenso a la Liga Profesional.

En la tarde de ayer, Lucas falleció en el hospital El Cruce, de Florencio Varela donde se encontraba internado. Y la sociedad argentina y el fútbol se unieron en el reclamo de justicia, ante un nuevo caso de violencia institucional. Desde el retorno a la democracia en Argentina en 1983, la CORREPI (Coordinadora Contra la Represión Policia e Institucional) denunció más de 5000 casos de asesinatos por parte de las fuerzas policiales. Solo en 2020 hubo 103 casos de ¨gatillo fácil¨en el país.

Según la versión de las fuentes policiales, se trató de una persecución policial tras una alerta de la Comisaria Vecinal C4 contra un grupo de jóvenes a bordo de un auto Volkswagen Suran Azul, que aparentemente se negaron a ser identificados y huyeron. Y fueron interceptados en las calles Alvarado y Pedriel donde – a los tiros- detuvieron el vehículo con un saldo de un herido de bala (Lucas) dos detenidos, y un joven que logró escapar, pero que luego se entregó. Más tarde se conoció que en el auto de los chicos, la policía plantó un arma de juguete en el coche de los chicos para simular un enfrentamiento.

Los familiares y compañeros del futbolista fallecido contradijeron los dichos de la policía: ¨Lucas Salió de entrenar en Barracas Central con amigos del barrio de Florencio Varela, que iban a probarse al club. Y cuando salieron, pararon a comprar jugo en un kiosco y en ese trayecto se cruzaron con un auto, con cuatro personas que no tenían identificación policial. Eran policías de civil. Los chicos pensaron que les iban a asaltar, por eso aceleraron y ahí le dispararon a mi hijo. La policía lo mató, nos arruinaron la vida. No voy a descansar hasta que paguen. Quiero justicia para que mi hijo descanse en paz¨, contó entre llantos Cinthia López, mamá de Lucas.

Los oficiales fueron separados preventivamente por su participación en el crimen: Gabriel Isassi, Fabián López y José Nievas, entre tanto la justicia lleva adelante las investigaciones. El Ministro de Seguridad de la Ciudad, Marcelo D'Alessandro aseguró: ¨seremos inflexibles con los policías que actúen fuera de la ley¨.