El Sant Andreu se da un baño de masas en la celebración del ascenso

La plantilla recorrió las calles del barrio barcelonés acompañada por centenares de cuatribarrados

Xavi Molist prometió que el curso que viene el equipo estará “luchando por estar arriba”

La Plaça Orfila se vistió de cuatribarrada

La Plaça Orfila se vistió de cuatribarrada

SPORT.es

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Con el pitido final en ElHelmántico se desató la euforia. Ni la tormenta, ni el parón para achicar aguas, ni siquiera los más de 1.000 aficionados locales que abarrotaban las gradas consiguieron evitar que el Sant Andreu conquistara el ansiado ascenso a Segunda RFEF tras ocho temporadas en Tercera.

La euforia se desató en Salamanca, convirtiendo la ciudad en cuatribarrada por unas horas, pero la fiesta no se quedó ahí y ayer, la plantilla encabezada por el técnico, Xavi Molist, se dio un baño de masas por las calles del barrio barcelonés, que no dudó en teñir de amarillo y rojo cada rincón para acompañar a sus particulares héroes.

La plantilla, que llegó de Salamanca pasadas las tres de la tarde, había quedado emplazada a las 18.30 horas en el Narcís Sala desde donde partió la comitiva en un recorrido por las calles del barrio de Sant Andreu hasta la sede del distrito.

En el camino, plantilla y aficionados hicieron una parada en la Iglesia del barrio donde fueron recibidos por el párroco, realizaron una ofrenda floral y entonaron el Virolai. A la salida, los aficionados que esperaban fuera obsequiaron al equipo con tracas, cánticos y música.

El broche de oro se puso en el tradicional parlamento desde el balcón de la sede del Consejo del Distrito, donde los jugadores cantaron y aplaudieron junto a los aficionados. Visiblemente emocionados fueron pasando por el micrófono para dedicar unas palabras a los seguidores.

El primero de ellos fue Jaime, al que no dudaron en cantarle "Jaime, quédate". Josu también fue reclamado por los aficionados, así como Albertito y uno a uno el resto de integrantes de la plantilla.

No faltaron los cánticos contra su eterno rival, el Europa, que consiguió el ascenso directo como líder del grupo.

"El último ascenso fue hace 15 años contra la Arandina y ahora, ya tocaba otra vez. El Helmántico se nos quedó pequeño, y lo asaltamos. ¿Y aquí tenemos el botín!", dijo el presidente de la entidad, que dedicó el título a los cuatribarrados que han fallecido en los últimos tiempos como Miquel Jové, socio número 2 del club.

"Nuestros jugadores, forjados en la adversidad, ayer fueron gladiadores que lucharon con honor y trajeron la victoria", continuó. "Hemos logradique Sant Andreu se conozca y respete por todo los sitios donde hemos estado", zanjó, para dar paso a Xavi Molist.

El preparador, fue breve en su intervención, dando las gracias a aficionados y jugadores. "Gracias por estar desde el día uno al lado del equipo, creo que el equipo os ha respondido todo el año. Estoy seguro que el Sant Andreu el año que viene estará luchando por estar arriba", añadió, levantando los cánticos de "A Primera, oe" y reclamando más dinero a la junta para hacer crecer al equipo.

El siguiente fue el capitán, Joan Noguera quien afirmó que "es un orgullo y una responsabilidad defender estos colores, llevo muchas temporadas aquí y nunca había vivido algo igual, creo que se están haciendo las cosas muy bien. Nos ha costado un poco pero ya lo tenemos aquí". También agradeció su apoyo a la afición. Tras él, sus compañeros fueron pasando uno por uno, compartiendo la alegría con los aficionados.

Emotivo fue el discurso de Josu, quien agradeció a sus compañeros por acompañarle en el mal momento personal que está pasando en los últimos meses.