Messi vuelve con Argentina nueve meses después

"Un genio que lleva la ilusión de 50 millones de argentinos. No te lo pierdas”. El anuncio oficial de la AFA resume mejor que ningún cronista la sensación con la que Argentina vuelve a abrazar a Leo Messi. Ha sido un paréntesis extraño, nueve meses de separación temporal que hoy se cierran de manera oficial.  Messi acabó el Mundial de Rusia tan frustrado que anunció su segundo adiós a la selección, pero curadas las heridas por el paso del tiempo, hoy vuelve a competir con la albiceleste. 

Lo hará en el campo del Atlético de Madrid y ante Venezuela, en un partido amistoso: será titular, como confirmó ayer su nuevo seleccionador, Lionel Scaloni, pero es poco probable que dispute los 90 minutos. 

Cuando salte al campo y mire a su alrededor, Messi se sentirá extraño: no ya por tantos meses de ausencia, sino porque sus compañeros poco tendrán que ver con los que jugó el Mundial. En ataque, por ejemplo, verá a Gonzalo ‘Pity’ Martínez, jugador del Atlanta estadounidense que ha debutado de la mano de Scaloni y a Lautaro Martínez (Inter), que ya estuvo en el Mundial de Rusia, pero sin minutos.

En el centro del campo actuarán Paredes (PSG) y Lo Celso (Betis), que también fueron llamados por Sampaoli para el Mundial, pero en defensa también habrá recién llegados, caso del central Foyth (Tottenham) o Montiel, de River Plate, nombres que ilustran la renovación silenciosa que Scaloni está llevando a cabo desde que asumió el mando de Argentina tras la decepcionante etapa de Sampaoli.  Dybala forma parte de la convocatoria, pero no jugará. Icardi o Higuaín ni siquiera entraron en la lista de Scaloni.

PRECAUCIÓN CON SU ESTADO FÍSICO

El estado físico de Messi será uno de los grandes puntos de interés del partido: el propio Scaloni confesó que el jugador del Barça llega al amistoso con la fatiga propia de la exigencia de la temporada y que conviene tener en cuenta lo que el jugador tiene por delante: no solo los tres títulos en juego con el Barça, sino también la Copa América que se jugará en Brasil (14 de junio-7 de julio) y que podría ser el primer gran torneo que Messi gane con la selección absoluta, tras conquistar el Mundial sub-20 y la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín.