BALONCESTO-EUROLIGA

El Barça Lassa arrolla al Lokomotiv con un imparable Alex Abrines

El escolta mallorquín fue el gran protagonista de la victoria del Barça Lassa ante el Lokomotiv (82-70. Con sus 25 puntos lideró al conjunto azulgrana en un triunfo aplastante que le deja a un paso de la Final Four de Berlín

Abrines fue el mejor del partido

Abrines fue el mejor del partido / sport

Ramon Palomar

En un Palau de las grandes ocasiones, el Barça Lassa se adelantó en la serie de cuartos ante el Lokomotiv con otra convencente victoria (82-70) que le deja a un solo triunfo de la Final Four de Berlín. El equipo respondió al reto y se impuso ante un Lokomotiv que no tuvo recursos para frenar el torbellino azulgrana, personificado en Alex Abrines. El mallorquín batió su record anotador en la Euroliga, con 25 puntos y lideró a un Barça que cuajó otra gran actuación, especialmente en la segunda mitad. Berlín ya está un poco más cerca.

76995

EUROLEAGUE

82
70
Alineaciones
BARÇA LASSA
Satoransky (13), Navarro (9), Perperoglou (1), Doellman (12), Tomic (7) -cinco inicial-, Abrines (25), Samuels (5), Ribas (8), Arroyo (-), Oleson (2), Vezenkov (-) y Diagne (-).
LOKOMOTIV KUBAN
Delaney (15), Voronov (2), Broeckhoff (-), Claver (-), Randolph (16) -cinco inicial-, Janning (11), Singleton (13), Draper (9), Zubkov (2) y Bykov (2).

El Barça salió decidido a tomar el control del partido desde el primer instante. Con un inspirado Navarro y con un agresivo Satoransky, el Barça cogió pronto el mando del electrónico (7-2). Buena defensa y fácil anotación, era la mejor carta de presentación blaugrana para el tercer partido. Aunque pronto reaccionó el Lokomotiv de la mano de sus dos jugadores determinantes, Delanay y Randolph. Ambos se echaron el equipo a la espalda, y con dos triples consecutivos del base, igualaban el partido (9-9).

El Barça seguía defendiendo bien, aunque el acierto de las dos estrellas del equipo ruso pesaron demasiado y lograron desestabilizar al conjunto de Pascual, que pasó de dominador a dominado. Lo que ano anotaba Delaney, lo hacía Randolph, mientras el Barça perdía fluidez en ataque. Eso se tradujo en un control de los visitantes, que llegaron a irse de 7 (16-23) tras un nuevo triple de Delaney. Los azulgrana lograban neutralizar ese mal momento, con un triple final de Ribas, que dejaba un preocupante 19-23 al final del cuarto. Con 21 puntos de los 23 del Lokomotiv para su pareja estrella, estaba claro dónde radicaba el problema.

Pascual movió banquillo y dio entrada a Arroyo y a un Abrines que resultaría determinante en este segundo cuarto. Doellman abría el segundo parcial con un triple, cosa que volvía a relanzar al Barça, necesitado de anotación exterior para romper la pegajosa defensa rusa. Ribas se enganchaba como una lapa a Delaney mientras que Bartzokas sorprendía dejando a Randolph en el banquillo. Pascual también tomó una decisión controvertida, dejando al equipo sin bases a los tres minutos de juego. Ribas cogía el timón por Arroyo (24-27).

Aunque el protagonista del segundo parcial fue otro. Alex Abrines cogió la responsabilidad ofensiva y empezó a anotar todo lo que caía en sus manos. Dos triples consecutivos relanzaban al Barça en el marcador (32-27) mientras Bartzokas no encontraba la forma de pararle. Un nuevo triple del mallorquín mantenía al Barça en control, ante un Lokomotiv más impreciso y sin Randolph, del que se olvidó Bartzokas. A Pascual le funcionaba el equipo en pista y se olvidó de los bases disfrutando del mejor Abrines (18 puntos). Dos triples que se salieron del aro pudieron llevar la renta del Barça al doble dígito. Pero no sucedió. El Lokomotiv se agarraba al duelo, aunque a remolque de los azulgrana al descanso (42-36). Todo bien encaminado.

GRAN SEGUNDA MITAD BLAUGRANA

El Barça arrancó tras el descanso ofreciendo los mejores minutos de la noche. Volvía Satoransky al quinteto titular, y quizá enrabietado por no haber tenido protagonismo en el segundo cuarto, se echó el equipo a la espalda y anotó las dos primeras posesiones. Un Barça agresivo en defensa y clarividente en ataque endosaba un 6-0 de inicio, que le llevó a los 12 puntos de renta (48-36). El equipo empezaba recordar al que arrolló en Rusia. Navarro también se añadía a la fiesta con un triple y el Palau rugía de nuevo. Solo Janning respondía por el Lokomotiv, pero el partido solo tenía un dueño y era el Barça (56-44).

Bartzokas no encontraba soluciones porque la efectividad de Delaney cayó en picado y Randolph se había enfriado por completo. Con un Barça desatado en ambas zonas del campo, Satoransky levantó el Palau con un mate estratosférico que daba a los azulgrana su máxima renta (61-48). Solo Singleton lograba detener la hemorragia que sufría el Lokomotiv, que como mal menor acabó el cuarto solo 11 abajo (61-50). Faltaba otro buen esfuerzo para rematar el partido.

Pascual dio descanso a sus 'guerreros' del tercer cuarto excepto Abrines, que con otro triple sideral batía su marca en la Euroliga, con 24 puntos (64-52). Pero el impulso del tercer cuarto fue más que suficiente para que la moral blaugrana fuera creciendo mientras el Lokomotiv, impotente, se fue empequeñeciendo. En pleno desbarajuste visitante, el Barça alcanzó hasta los 23 puntos de renta (82-59) con cinco minutos por delante. La victoria ya estaba en el zurrón y la celebración empezó mucho antes del final, permitiendo al Lokomotiv maquillar el resultado final (82-70). Un último esfuerzo el jueves, y el Barça regresará de nuevo a una Final Four, donde debe estar siempre.