Fury, nominado a la "Personalidad deportiva del año" entre las críticas

En el pasado mes de noviembre, <strong>Tyson Fury protagonizó una de las mayores sorpresas de la historia reciente del boxeo al derrotar a Wladimir Klitschko</strong>, que llevaba once años consecutivos reinando en los cuadriláteros. El púgil británico consiguió acabar con la racha de 22 victorias del ucraniano y sumó su vigesimocuarto triunfo seguido.

Después de lograr el título de mejor boxeador del mundo, la BBC le añadió en la lista de los doce candidatos a llevarse el premio a la "Personalidad deportiva del año".

Esta nominación fue muy criticada por diversos sectores, ya que Tyson Fury acostumbra a hacer declaraciones subidas de tono en referencia a la homosexualidad y las mujeres. Y, por ello, la comunidad LGBT (lesbianas, gays, bisexuales y transexuales) inició una campaña de recogida de firmas para que el medio de comunicación británico rectificara en su decisión de incluir a Fury entre los candidatos.

Scott Cuthbertson, activista de LGBT, acusó a la BBC por incluirle en la lista. El miembro de este colectivo dijo no entender como "la BBC ha puesto a Tyson como un ejemplo a seguir para los jóvenes" y añadió que "en repetidas ocasiones ha hecho comentarios degradantes, insultantes, homofóbicos y sexistas".

Tyson Fury, criado en una familia gitana de tradición católica, siempre se ha postulado en contra de la homosexualidad y ha protagonizado diversas declaraciones cercanas al machismo.

Pese a que asegura no ser sexista, el actual campeón de los pesos pesados dijo en una ocasión que, para él, "el mejor lugar para una mujer es la cocina y de espaldas". Y, aunque también haya reconocido no odiar a los homosexuales, llegó a comparar su legalización con el aborto y la pedofilia. 

"Hay solo tres cosas que se necesitan consumar para que el diablo entre en tu hogar: una de ellas es la legalización de la homosexualidad, otra es el aborto y otra es la pedofilia", comentó recientemente Tyson Fury.

Ante las quejas por su candidatura a la "Personalidad deportiva del año", el boxeador nacido en Manchester admitió no ser el mejor ejemplo y que este premio no le interesa especialmente. "Con suerte no ganaré el premio ya que no soy el mejor ejemplo a seguir en el mundo para los niños, que se lo den a alguien que lo vaya a apreciar", respondió el púgil.