DAKAR

Viladoms: "El Dakar siempre da respeto"

Tras muchos años vigilando las espaldas de Marc Coma en el Rally Dakar, Jordi Viladoms espera con ansia la nueva edición de la carrera, en la que cumplirá su décima participació

Jordi Viladoms Dakar

Jordi Viladoms con su KTM 450 Rally del Dakar / sport

L.LÓPEZ ALBIAC / S. MEJIAS

- La retirada de Marc Coma le deja a usted como el piloto más veterano y con más galones dentro del equipo oficial KTM, dominador del Rally Dakar los últimos años. ¿Se siente cómodo con su nuevo papel?

- Sí, me gusta y estoy contento. No puedo decir que soy el líder del equipo pero sí es verdad que tendré más grado por mi experiencia y más poder de decisión en la estrategia. Como en su día hizo Marc Coma conmigo, KTM me ha responsabilizado de hacer el traspaso con los pilotos jóvenes que llegan al Dakar, que son campeones del mundo en sus respectivas disciplinas y muy rápidos pero no tienen bagaje en esta carrera.

- Sin Coma, en KTM no tienen un líder definido pero  forman una estructura todopoderosa. ¿Se consideran favoritos?

- Somos cinco pilotos y de salida no hay una jerarquía, eso se establecerá en función de como vaya el rally. La estrategia es no sacrificar a nadie y aplicar la lógica hasta que llegue el momento de hacer labor de equipo. A nivel individual, son más favoritos los dos pilotos de Honda ( Joan Barreda y Paulo Gonçalves) pero nuestra fuerza es el conjunto como equipo.

- ¿Esperaba que Coma se bajara de la moto tan pronto?

- Ni mucho menos, nadie en el equipo se lo esperaba. Después de ganar su quinto Dakar se comentaba que planeaba pasarse a los coches.  Creímos que estaría un año más en motos y luego daría el salto a las cuatro ruedas, no que lo dejaría para asumir la dirección deportiva. Al principio me chocó muchísimo, pero lo he entendido.

- ¿Le augura un buen recorrido?

- Creo que lo hará bien. Para los motards  es muy positivo porque sabe mejor que nadie que cosas nos favorecen y nos perjudican. Y también su espíritu de aventura, de primar más la navegación, se dejará notar. No ahora, es pronto, pero sí a la larga, a la hora de diseñar futuros recorridos, Marc tendrá más en cuenta a las motos.

- Comparte equipo por primera vez con Laia Sanz, ¿cómo va?

Ha sido una sorpresa para todos y no solo por sus resultados. Después de ver su profesionalidad y su manera de trabajar entiendo porque ha llegado tan lejos y acumula esa cantidad de títulos.  Es muy valiente. No sé exactamente donde está su límite. Hay que tener en cuenta que ha ganado el Mundial de enduro este año, si se dedicara en exclusiva a los raids aún podría tener margen para subir un peldaño más arriba.

- ¿Es el Dakar más abierto que ha disputado nunca?

- Si, muy interesante. En la parrilla de salida no hay ningún piloto de motos que haya ganado la carrera. Los que tenemos mejor palmarés somos yo, Paulo Gonçalves y Rubén Faria, todos con un segundo puesto. Sin la figura de Marc y antes Cyrill Despres marcando el ritmo, todo es una incógnita.

- ¿Qué trampas les reserva esta edición?

- Están concentradas en la segunda semana, porque en la primera no ha habido margen para grandes inventos. Nos preocupan en especial las etapas en altura, que serán tres días seguidos muy exigentes, y luego vienen las etapas más difíciles, de mucho calor... sin olvidar la salida mezclada de coches, motos y camiones en Fiambalá, un invento de Marc que puede hacer estragos.

- En diez años de Rally Dakar, ¿qué ha aprendido?

- Que no se puede ir allí con expectativas, es peligroso porque cualquier circunstancia te puede dejar KO. Hay que ir con prudencia,  siempre con mucho respeto.