La pizarra del doble clásico, ¿qué podemos esperar de Valverde?

Valverde: "Messi es superlativo"

 El técnico azulgrana valoró la victoria y la actuación del astro azulgrana en rueda de prensa / Atlas

Dídac Peyret

Dídac Peyret

¿Qué estrategia seguirá Valverde para los dos clásicos? Jugar dos partidos seguidos con solo cuatro días de distancia ante el mismo rival y en el mismo escenario supone siempre un reto enorme para técnicos y futbolistas. 

En el baloncesto es más habitual que en el fútbol, sobre todo cuando llegan los playoffs, un contexto que convierte los enfrentamientos en un puzzle para los entrenadores. 

Lo explicaba así Ricky Rubio, jugador de los Jazz, a este diario tras su primera experiencia en la NBA. "En los playoffs tienes tres días para preparar el primer partido y después juegas contra el mismo equipo cinco, seis o siete veces. Cuando van pasando los partidos, las cosas que hacías bien ya no las haces tan bien porque las defienden mejor. Y las cosas que haces mal se acentúan porque los rivales buscan eso. Es como un juego de ajedrez".

El Barça habrá jugado tres veces ante el Real Madrid en solo 24 días y los dos equipos se conocen muy bien. Pero en estos encuentros acostumbra a aparecer algún elemento inesperado o un secundario insospechado. Basta con recordar que Malcom y Lucas Vázquez fueron los goleadores de la ida copera.  

En las últimas semanas Valverde ha ido introduciendo pequeñas variaciones en el once para evitar el desgaste y todo apunta a que podría mantener esa línea en el Bernabéu. Parece poco probable que entre el once del miércoles y el del sábado haya un gran número de cambios.

En primer lugar porque el técnico no es muy partidario de rotaciones radicales, menos aún ante equipos de la envergadura del Madrid. Y en segundo porque después de los dos clásicos pasarán siete días hasta el próximo duelo liguero ante el Rayo.

Es verdad que el miércoles habrá la final de la Supercopa de Catalunya, pero será un partido para los menos habituales. Un encuentro en el que podría debutar Jean-Clair Todibo, inédito hasta ahora.

Antes, el Barça se medirá este miércoles al Madrid en la vuelta de las semifinales de Copa tras el 1-1 de la ida. El más exigente de los dos clásicos, tanto por el resultado de la ida como por la cómoda situación del Barça en la Liga. 

EL BERNABÉU, CAMPO PARA CORRER PARA DEMBÉLÉ

Asusta pensar lo que puede hacer Dembélé en un campo como el Bernabéu si se rompe el partido. La titularidad de Coutinho en el Pizjuán ya dio pistas de que Valverde pensaba en el francés para la vuelta copera.

Un campo de las dimensiones del Bernabéu es un mundo de posibilidades para un jugador como él, que exhibe su mejor nivel cuando tiene metros para correr. El francés apunta a titular el miércoles en la banda izquierda, pero no sería raro que Coutinho cogiera el relevo el sábado en el once.

Valverde lleva semanas insistiendo con el brasileño para recuperarlo de cara a la fase decisiva de la temporada. De momento no lo ha logrado y Coutinho simplemente no está. El brasileño es una sombra del futbolista que la temporada pasada tuvo un impacto inmediato en el equipo solo llegar.

Messi y Suárez parecen intocables para los dos encuentros.

A VUELTAS CON ARTURO VIDAL

Valverde ha creado un equipo con una serie de constantes (jugadoreds que difícilmente salen del once) y algunas posiciones reversibles, donde ha incentivado la competencia entre dos o más jugadores.

En el centro del campo Busquets y Rakitic han sido los pilares, mientras que la tercera pieza ha sido mucho más flexible. Dos jugadores se han disputado sobre todo esta pieza: Arthur y Arturo Vidal.

Pero justo en el momento que Vidal tenía vía libre para ser titular, por la lesión del brasileño, el chileno ha mostrado el peor nivel de la temporada. Tanto es así que Valverde apostó por Sergi Roberto en Lyon como interior derecho.

En Sevilla, volvió al once Vidal pero al descanso ya no volvió a salir al campo. Su mal momento invita a pensar que el miércoles Sergi Roberto será una de las tres piezas del centro del campo con Semedo en el lateral derecho.

El papel de Aleñá es una incógnita, al igual que el de Arthur, que está pendiente de recibir el alta. El partido del miércoles le llega demasiado pronto, pero en el sábado podría tener minutos. 

EL FACTOR LENGLET

Valverde lo reservó ante el Sevilla y nadie duda de que formará pareja con Piqué este miércoles. El francés se encuentra en un momento formidable de forma y asegura orden y salida de balón. 

Umtiti estuvo desbordado en el Pizjuán, lejos de su mejor forma tras meses de inactividad, en un partido de mucho ritmo. Solo en el partido liguero en el Bernabéu tendría alguna opción de entrar en el once, aunque parece poco probable. 

La presencia de Vinicius en el extremo izquierdo invita a pensar que Semedo, por sus características, será el titular en el lateral derecho al menos el miércoles.

¿Y SI VALVERDE CAMBIA DE SISTEMA?

Ya lo hizo gran parte de la segunda parte en el Pizjuán. El Barça jugó muchos minutos con un 4-2-3-1 que tuvo un efecto revitalizante en el equipo. Con este sistema varios jugadores subieron su nivel. Rakitic, que formó doble pivote con Busquets, y recibió siempre de cara. O Messi, que tuvo muchos más jugadores por delante del balón y más líneas de pase.

El sistema no solo permitió a Messi jugar de 10, también hizo que Dembélé ocupara la banda derecha, la posición en la que más brilla. Además posibilitó que Coutinho y Ousmane pudieran jugar juntos.

Basta recordar que la temporada pasada Valverde apostó sobre todo por un 4-4-2 para volver esta temporada al tradicional 4-3-3. Muchas incógnitas para un doble clásico que será un desafío extremo para Barça y Madrid.