Tim Merlier se lleva la Brujas-De Panne, el 'Mundial de los esprinters'

El belga del Alpecin Fenix salió vencedor en una apretada llegada que precisó de 'foto finish' en la 46ª edición de esta clásica

Decepción para Dylan Groenewegen, perdedor de la peor forma posible, y menos trauma para Nacer Bouhanni

Merlier, en lo más alto del podio

Merlier, en lo más alto del podio / AFP

EFE

El título del simbólico "Mundial de los esprinters" fue para el belga Tim Merlier (Alpecin Fenix) como vencedor en una apretada llegada que precisó de "foto finish" de la 46 edición de la clásica belga Brujas-De Panne, disputada sobre un recorrido de 207 km.

Merlier (Wortegem-Petegem, 29 años), reciente ganador de la Nokere Koerse, triunfó por un tubular, siendo preciso la observación de la foto de llegada para confirmar que había logrado la tercera victoria del curso. Finalmente se comprobó su éxito, con un tiempo de 4h.44.55, a una media de 43.8km/h.

Gloria para Merlier, decepción para el neerlandés Dylan Groenewegen (BikeExchange), perdedor de la peor forma posible, y menos trauma para el francés Nacer Bouhanni (Arkea Samsic), segundo y tercero respectivamente.

La clásica de la costa del Mar del Norte que transita por la parte occidental de Flandes no tenía dificultad algunas, todo llano, nada de adoquines, ideal para volar y propiciar una llegada masiva. El peligroso paso por De Moeren, temido por el viento, no fue determinante, pero en ocasiones los nervios y los errores causaron caídas. No faltaron los accidentes.

Perjudicado fue el Movistar, con la retirada del madrileño Gonzalo Serrano y los batacazos del velocista alemán Max Kanter y del suizo Johan Jacobs. No fue una carrera de buen recuerdo para la escuadra telefónica.

Después de la salida de la monumental Plaza Markt Square de Brujas, capital de Flandes occidental, otra Venecia con abundantes de puentes y canales, se formó una escapada con tres tres valientes, Enrico Battaglin, Dimitri Peyskens y Jens Reynders. Inocua fuga que apenas alteró los planes de un pelotón que controló las diferencias con alta precisión.

A 29 de meta el pelotón ya había terminado con las ilusiones de los atrevidos del día. Se olía esprint. El Quick Step avisó de lejos de sus intenciones pensando en Cavendish, pero el británico no entró bien colocado en la definitiva pista de despegue hacia la victoria, a pesar de que su lanzador, Morkov, cumplió con su trabajo, como siempre.

Sin Cavendish en el lío, y sin el alemán Ackermann, rodando por el suelo, el esprint se despojó de un par de candidatos. Groenewegen atacó de lejos, tomó la delantera de la desatada marabunta, pero se le puso al lado Merlier. Ambos llegaron con las ruedas juntas, en paralelo, a distancia inapreciable para el ojo humano.

Intervino la foto de llegada, donde salió retratado Tim Merlier, sonriente ante la sexta victoria de su equipo en 2022, y la tercera particular, 2 de ellas en el World Tour. Un motivo para sonreír en De Panne, lugar de playa y disfrute para franceses y belgas en época estival. Uno de ellos adelantó la fiesta.