Mark Clattenburg: "¿Realmente hubo falta? Es muy subjetivo. Y lo pité porque eso devolvía el equilibrio"

El árbitro Mark Klattenburg reconoció su error cuando el gol de Ramos de la final de la Champions League de 2016 apareció en el marcador. Lo hizo, según explicó en el programa televisivo “The Brazilian Shirt Name”, para compensar el error que cometió con el primer gol del Real Madrid. En aquel momento decidió señalar el penalti de Pepe sobre Fernando Torres, pero ahora ha decidido aclarar cómo llegó a tomar tan polémica decisión.

En definitiva, el penalti fue una forma de compensación al Atlético de Madrid. "Fui muy afortunado en esa final, porque se me presentó un penalti de esos que son 50/50. Torres estaba claramente adelantado ante Pepe, muy claramente, y hubo falta. ¿Realmente hubo falta? Es muy subjetivo. Y lo pité porque eso devolvía el equilibrio, ya que el Madrid ya había tenido su oportunidad con ese gol en fuera de juego ".

Klattenburg  prosigue: “Yo supe que Bale la había tocado en el medio, lo que facilitó que Ramos marcara el 1-0 en fuera de juego. Entonces le pregunté a mi asistente si había habido ese toque tras el saque de falta. Él estaba totalmente paralizado. No teníamos tecnología y tenía que reiniciar el partido. Finalmente recuperé la comunicación con mi asistente y me dijo que el micrófono y los cascos habían dejado de funcionar justo en ese momento. Estaba muy confundido. Fue una decisión muy difícil", afirmó el colegiado.

Además, el error posterior de Griezmann supuso un cierto alivio para el árbitro, pues los aficionados atléticos se centraron más en él y así pasó más desapercibido su papel en el encuentro: "Entonces Griezmann chuta y le da al larguero y yo pensé: 'Wow, este es mi día, es un día perfecto para un árbitro. El Atlético tuvo claramente la oportunidad de empatar el gol en fuera de juego y fallaron. Y ahora me culparán a mí pero no pueden porque Griezmann tuvo la oportunidad del penalti."

Pese a toda la polémica, el Atlético logró empatar el encuentro gracias a Carrasco. Fue tras la prórroga, ya en plenos penaltis, cuando el error de Juanfran decantó la final a favor de su eterno rival.