Un histórico Salah no impide el intrascendente tropiezo 'red'

Un Liverpool despreocupado cierra la fase de grupos con empate

 El Liverpool empató ante el Midtjylland en el último partido de la fase de clasificación / MEDIAPRO

Roger Payró

Día histórico en un partido sin historia. El Liverpool empató en su visita al Midtjylland (1-1) en un duelo donde no había nada en juego pero que sirvió a Salah para convertirse en el máximo goleador de la historia del Liverpool en Champions. El egipcio abrió la lata y superó así los 21 de Steven Gerrard. El ‘Faraón’ toma el relevo de toda una leyenda ‘red’. No menos importante será el día para el cuadro danés, que se despide de su primera temporada en la élite europea puntuando contra todo un hexacampeón del torneo.

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Champions League

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Alineaciones
Midtjylland
Hansen; Cools, Sviatchenko, Scholz, Paulinho; Cajuste, Onyeka (Isaksen, 63'), Evander (Madsen, 90'); Dreyer (Sisto, 76'), Kaba (Pfeiffer, 90') y Mabil (Anderson, 63').
Liverpool
Kelleher; Alexander-Arnold, R. Williams, Fabinho (Koumetio, 46'), Tsimikas (Robertson, 61'); Keïta (Henderson, 62'), Clarkson, Minamino; Salah,Origi (Firmino, 71') y Jota (Mané, 87').

Cierto es que podríamos hablar más bien del Li’B’erpool. Y es que Klopp, como era de esperar, dispuso un once con muchísimas alternativas. Salah era de los pocos reconocibles y en el primer minuto llegó su histórico tanto. Probablemente, uno de los más feos de su carrera. El destino es así de caprichoso. En un error en cadena de la zaga del Midtjylland, Cools intentó apagar el incendio en última instancia cuando el egipcio encaraba a Hansen. Desvió el balón y por inercia, Salah marcó de caño sin querer. Es para verlo.

Prometía ocasiones el duelo. Las hubo, y sobre todo por parte del conjunto de Brian Priske. Un testarazo de Sviatchenko desviado y otro de Kaba, que sacó Fabinho sobre la línea, fueron las más claras antes del asueto. Segundo gol que salva in extremis el brasileño en esta Champions tras el que le negó a Tadic en Ámsterdam.

De los que tenían que dar un paso al frente en los ‘red’, Minamino sacó la nota más alta. Suyo fue el centro a Jota que el luso no pudo transformar. Fue uno de los partidos más grises del ex de los Wolves desde su llegada.

Tras el paso por vestuarios, el Midtjylland se lanzó del todo a por el empate y llegó a someter al Liverpool en ciertas fases. Encontró el premio con una rigurosa pena máxima de Kelleher sobre Dreyer que Scholz transformó. A partir de ahí, duelo a tumba abierta y ocasiones por doquier. Scholz llegó a marcar el 2-1 pero fue anulado por órsai. Un fuera de juego desde fuera del terreno de juego. Todo muy ‘random’.

Kelleher intervino después para evitar el tanto de Sviatchenko y Henderson en la siguiente para abortar un seis contra tres. Mané entró en los últimos minutos y su primer remate de cabeza sirvió para asistir a Minamino, que la guardó en la red. Pero el VAR lo anuló por mano del propio senegalés. El descuento, de ocho minutos, dio de sí, aunque el 1-1 ya no se alteró. Cayó de canto la moneda.