Materia reservada

Luis Enrique quiere sacar de dudas a Pedro

El tinerfeño teme quedarse sin un rol importante, pero su idea no corresponde con la visión del míster

Jordi Gil

Pedro Rodríguez vive en la incertidumbre desde que terminó la temporada. El jugador acabó disputando minutos importantes con el Tata Martino, firmó su mejor marca goleador en la Liga desde que forma parte de la primera plantilla del Barça con 15 goles y disputó el Mundial de Brasil. Su rendimiento se mantiene en una línea de regularidad que llevó a Luis Enrique a transmitir a la dirección deportiva que era instransferible, una condición avanzada por SPORT y ratificada por el presidente el pasado miércoles en rueda de prensa. Pese a todo, el jugador sigue con unas dudas que quedarán resueltas cuando el técnico se reúna con él al término de las vacaciones y le aclare su situación deportiva.

Luis Enrique conoce muy bien al jugador ya que lo tuvo bajo sus órdenes en el Barça B en la temporada 2008-09. Pedro alternaba el primer equipo con el segundo junto a Víctor Sánchez y tuvo problemas para dejar atrás ciertos altibajos debido a esta alternancia con una metodología que tenía distintos matices como era la de Guardiola y la del asturiano. En la segunda vuelta fue cuando se consolidó y tiró del equipo hacia una remontada que estuvo a punto de dejar al equipo en el play-off. Pedro acabó marcando diez goles y resultando el futbolista más determinante del Barça B.

El nuevo entrenador blaugrana tiene en muy alta consideración al tinerfeño y ha dado órdenes de no atender las ofertas que puedan llegar. Pedro es un futbolista con mucho cartel y propuestas no le faltarían. Arsenal o Liverpool en la Premier League o el poderoso PSG, en el campeonato francés, estarían dispuestos a pujar por él en caso de que se situara en el mercado, un contexto que no contempla el club blaugrana.

La confianza de Luis Enrique en el futbolista es total, pero las dudas del delantero son comprensibles ya que no conoce las intenciones de boca de su entrenador. En la sede del Mundial en Curitiba escuchaba comentarios positivos procedentes de Barcelona, pero al mismo tiempo no recibía una llamada directa del club comunicándole que era intocable en la plantilla. Los acontecimientos se sucedían y Pedro veía como jugadores de peso como Cesc Fàbregas o Xavi Hernández se despedían, por lo que los vientos de revolución cada vez soplaban con mayor insistencia añadiendo las bajas de otros dos capitanes como son Víctor Valdés o Carles Puyol.

El delantero se marchó de la Copa del Mundial sin recibir la ansiada llamada y el cara a cara con el míster se demorará hasta la vuelta al trabajo, fijada el 24 de julio para los internacionales españoles. Será entonces cuando Luis Enrique transmita a Pedro su deseo de que sea una de las piezas básicas en su nuevo proyecto. El principal valor que tiene en cuenta el asturiano es su polivalencia. Pedro es un futbolista que permite jugar con una flexibilidad de sistemas muy variado. Puede adaptarse a cualquier posición del flanco ofensivo y, incluso, en otras posiciones del campo. En algunas ocasiones accidentes ha llegado a actuar de carrilero, una posición que no es descartable para Luis Enrique, un técnico que le gusta jugar con laterales muy ofensivos. La variantes de actuar con tres centrales y dos carrileros que se incorporan al ataque se ha puesto de moda en este Mundial, con la Holanda de Van Gaal, uno de los maestros del holandés, como referente.

Luis Enrique espera que el delantero se tranquilice una vez inicie la pretemporada y se ponga a punto físicamente para afrontar el campeonato con plenas garantías. La llegada de Luis Suárez no debe asustarle ya que Pedro siempre ha tenido que luchar con cracks en la línea ofensiva como Eto’o, Henry o Ibrahimovic y él siempre ha sido el que ha continuado en la plantilla. El tinerfeño está habituado a luchar y si mantiene su espíritu competitivo con el nuevo entrenador seguro que volverá a disfrutar de muchos minutos.