Los azulgranas dejaron escapar un 0-2 y se hundieron tras el descanso

'Empanada'... y primera derrota del Barça en la Liga

Algún día tenía que llegar. Y llegó en la 20ª jornada. El Barça sufrió su primera derrota liguera después de desperdiciar un 0-2 favorable ante la Real Sociedad

El Barça dejó escapar un 0-2 favorable y perdió ante la Real Sociedad

El Barça dejó escapar un 0-2 favorable y perdió ante la Real Sociedad / sport

Ricard López

El equipo azulgrana mostró su peor cara de la temporada y tiró por la borda un triunfo que, a la media hora, y con 0-2 a su favor, parecía en su mano. Igual que ocurrió el pasado miércoles ante el Málaga en la Copa, la imprecisión, las pérdidas de balón y, sobre todo, los despistes defensivos, condenaron al equipo, que acabó sucumbiendo 3-2 con un tanto de Aguirretxe en el descuento.

18938

Liga BBVA

3
2
Alineaciones
Real Sociedad
Bravo; Carlos Martínez, Iñigo Martínez, Mikel, De la Bella; Bergara, Illarra, Xabi Prieto (Rubén Castro, m.78); Chory Castro, Griezmann y Vela (Agirretxe, m. 82).
Barça
Valdés; Alves, Puyol, Piqué, Jordi Alba; Sergio, Fábregas (Mascherano, m.59), Xabi; Iniesta, Pedro (Adriano, min. 88) y Messi.

Y eso a pesar de que Tito Vilanova no hizo rotaciones y puso toda la carne en el asador presentando su once de gala. Los azulgranas mostraron dos caras opuestas. En la primera mitad, fueron el equipo temible y demoledor de siempre. Pero, en la segunda, se vinieron abajo. Como el día y la noche en apenas 90 minutos.

El Barça empezó encarrilando el duelo por la vía rápida. A los cinco minutos, Messi envió fuera uno de esos remates que no suele fallar, después de haberse quedado solo ante el meta Bravo. Pero a la segunda no perdonó. Apenas unos instantes después, enmendó su error logrando el 0-1 (6'): Bravo sacó mal, Iniesta condujo el balón tras la recuperación, se lo cedió a Leo (Cesc lo dejó pasar)... y el '10' marcó de chut raso y ajustadísimo al poste desde la media luna del área.

Los de Tito superaban con solvencia la agobiante presión defensiva de la Real. Aunque, eso sí, sus frecuentes pérdidas de balón daban pie a peligrosos ataques locales. Griezmann, en el 16', estuvo a punto de sorprender a Valdés desde la frontal.

Pedro, que recuperó la titularidad en detrimento de Alexis, continúa en línea ascendiente y volvió a ser de los más activos y peligrosos del duelo. El canario acarió el gol en el 14', al enviar al poste un precioso disparo de rosca después de recuperar el esférico en la banda. Y, en el 25', marcó el 0-2. Xavi se sacó de la chistera uno de sus mágicos pases 'marca de la casa' desde la medular y asistió para Alves que, tras entrar solo por la derecha, dio el pase de la muerte a Pedro. El canario, a puerta vacía en el área pequeña, culminó la acción a placer.

El Barça pudo haber sentenciado un cuarto de hora después cuando Messi, al borde del área, envió al poste de vaselina otro pase medido de Xavi. Era el segundo palo de los catalanes. Pero, para palo de verdad, el que vino a continuación.

Porque, de lo que mereció ser el 0-3, se pasó al 1-2 en cuestión de segundos. En un abrir y cerrar de ojos, los azulgranas se complicaron la vida de mala manera. Al igual que sucedió el miércoles ante el Málaga, sus errores defensivos le salieron carísimos. Entre Alves y Piqué dejaron solo a Castro, que entró como Pedro por su casa en el área... y, una vez allí, batió a Valdés de disparo raso y cruzado (1-2, 40').

El panorama del duelo cambió por completo a partir de ese momento. Y eso a pesar de que Messi, al filo del descanso, volvió a obligar a lucirse a Bravo (44').

El Barça hizo aguas en la reanudación, en la que la Real tomó el mando ante un rival nervioso, impreciso y atemorizado. La expulsión de Piqué, que no tuvo su día, agravó más las cosas. El '3' azulgrana vio la segunda amarilla en el 56', tras cometer una clara falta sobre Vela (la primera había sido a la media hora por entorpecer un saque de falta). Tito intentó recomponer al equipo dando entrada a Mascherano en lugar de a Cesc (59'). Pero el sufrimiento siguió...

Y fue precisamente el 'Jefecito' quien marcó de forma involuntaria el 2-2 en su propia portería. La enésima imprecisión colectiva de la retaguardia culé permitió a Castro disparar a placer dentro del área. El esférico rebotó en el argentino, y despistó a Valdés, que no pudo evitar el tanto (63').

El omnipresente Castro fue una auténtica pesadilla, pues ya había puesto a prueba a Valdés poco antes del empate (61'). Quedaba media hora por delante, y el Barça, en inferioridad, intentaba reaccionar. Pero no lo logró. Al contrario, apenas creó peligro. Y, para colmo de males, cuando todo indicaba que el duelo acabaría en tablas, llegó el 3-2. En pleno descuento, como el 2-2 del Málaga en la Copa. Carlos Martínez centró desde la banda y Aguirretxe, colándose fácilmente entre Mascherano y Puyol, selló el 3-2 en el área pequeña. Otro fallo incomprensible... y primera derrota liguera de la temporada. El Barça, sí, también es humano.