Barça B: un verano para pensar en grande

El Barça B debutará el próximo fin de semana ante el Algeciras en el Estadi Johan Cruyff. Lo hará con una plantilla muy joven, la más joven del campeonato, dirigida por Sergi Barjuan, que liderará desde el banquillo un proyecto que, por lo visto durante la pretemporada, está listo para crecer día a día y, sobre todo, preparado para competir en una competición tan exigente como la Primera RFEF.

De menos a más

Los resultados sirven como referencia, pero quedarse con ellos es la forma más sencilla de tener una visión sesgada de la realidad. El filial ha disputado seis encuentros, ganó los tres primeros, en los que marcó doce goles, y perdió dos y empató otro en los últimos tres. Sin embargo, la sensación sobre el césped es que el equipo, lleno de juveniles y con muchas ganas de aprender, han madurado con el paso de las semanas y los entrenamientos. La carga física ha sido muy exigente y eso también se ha notado, pero lo más importante ha sido ver cómo los nuevos conceptos introducidos por el cuerpo técnico han ido calando en el equipo.

La superioridad técnica de los blaugrana sirvió para imponerse sin problemas en el debut de pretemporada ante L’Escala (0-3) y también en el segundo test ante la FE Grama (6-0). De la misma manera, aunque ya con algo más de exigencia, el Barça B superó al Olot domicilio (1-3). Estas son las tres victorias en los seis encuentros disputados este verano. Y, pese a todo, las mejores sensaciones llegaron, más allá de la derrota ante el Girona, en el empate a cero ante el Nàstic y en la derrota por la mínima ante la UE Costa Brava el pasado sábado.

Buen nivel defensivo

La calidad de futbolistas como Peque, que apunta a ser una de las referencias en ataque esta temporada y ha acabado como máximo goleador veraniego con tres goles en los tres primeros partidos, sirve para ser optimistas a nivel ofensivo. También la aportación de Peque Polo o Jutglà, además de Nils Mortimer o Ilias Akhomach.

En cambio, en lo que más parece haber crecido el equipo desde la llegada de Sergi Barjuan es en saber defenderse con el balón y atacando. Como ocurrió el sábado en la última media hora en Palamós, cuando el Barça B encerró a los locales, que solo fueron capaces de anotar a la salida de un córner. Esa será una de las batallas durante la pretemporada, puesto que el equipo, eso sí, va escaso de centímetros.

Pendientes de Koeman

Jugadores que ahora mismo están en dinámica de primer equipo como Gavi, Nico o incluso Demir podrían ser grandes refuerzos para el filial, aunque todo dependerá de Koeman. También Balde o Arnau Tenas.