Un día aciago en el triple aparta a la Penya de las semifinales de Copa

El Joventut reaccionó en el último cuarto (23-13) pero no fue suficiente para superar al Tenerife en los cuartos de final (62-64)

Los verdinegros estuvieron horrendos en larga distancia (4 de 27) y cuando lograron ponerse por delante en el minuto final no supieron amarrar el triunfo

Huertas y Guillem Vives luchan por un balón en el partido de cuartos de final

Huertas y Guillem Vives luchan por un balón en el partido de cuartos de final / EFE

Ramon Palomar

Ramon Palomar

El Joventut quedó apeado de la Copa del Rey en los cuartos de final después de caer ante el Lenovo Tenerife (62-64) en un partido marcado por el desacierto en el triple de los verdinegros (4 de 27).

JOV-TEN

Copa del Rey

62
64
Alineaciones
Joventut, 62
(10+13+16+23): Paul (2), Vives (0), Willis (12), Parra (14), Tomic (15) - cinco inicial-, Ribas (6), Brodziansky (11), Ventura (0), Bassas (0), Birgander (2).
Lenovo Tenerife, 64
(21+15+15+23): Huertas (8), Salin (4), Todorovic (6), Doornekamp (8), Shermadini (12)- cinco inicial-, Borg (XX), Rodríguez (0), Sastre (4), Sulejmanovic (2), Wiltjer (8), Guerra (4).

A pesar de ello, reaccionaron en el último cuarto con Joel Parra tirando del equipo (23-13), pero no pudieron culminar la remontada y se vuelven para casa en un mal partido en ataque y la decepción de haber estado muy cerca de darle la vuelta.

El Joventut salió con la clara consigna de frenar el arsenal ofensivo desde el triple del Lenovo Tenerife. Pero no lo consiguió, al menos en un primer cuarto donde el acierto de los tinerfeños, con un acertado Doornekamp, unido al desacierto ofensivo de una Penya muy dubitativa, permitieron al conjunto de Txus Vidorreta abrir hueco muy pronto (4-13).

Muchos triples del Lenovo

Los triples del Lenovo caían uno detrás de otro mientras el Joventut era incapaz de frenar esos tiros y al mismo tiempo, no tenía ideas claras en ataque. Todo ello llevó al equipo tinerfeño a abrir una renta de 11 puntos al final del primer cuarto (10-21) con un Joventut incapaz de anotar un solo triple (0 de 5) mientras los tinerfeños lograban 5 de 8. La gran diferencia.

El duelo no iba a cambiar demasiado en un segundo cuarto donde continuó el desatino verdinegro, mientras el Tenerife aprovechaba sus acciones para seguir ampliando la renta a pesar de que Huertas perdía muchos balones (6).

Shermadini dio una máxima de 16 a su equipo (15-31) a 3:38 del descanso. El Joventut debía reaccionar, y lo hizo de una manera tímida, con un par de acciones de Willis y Ribas, para reducir la diferencia a 10 (21-31). Aunque al descanso, el Joventut seguía pagando un primer cuarto realmente desconcertante (23-36).

La Penya no reacciona

En la reanudación, no llegó la reacción esperada por parte de la Penya. Siguió errando demasiados tiros mientras los triples del Tenerife seguían cayendo. Primero Todorovic y luego Sulejmanovic devolvían la máxima a su equipo (27-43).

Con más voluntad que acierto, el Joventut trataba de engancharse al partido con acciones puntuales de Tomic o Parra. Un arreón final con canasta de Willis y otra de Tomic permitió al Joventut soñar con la remontada a 10 minutos del final (39-51).

Liderados por Joel Parra, el jugador que puso más carácter por los verdinegros con el apoyo de los aficionados, logró meterse en el partido y acercarse a solo dos puntos tras triple de Brodziansky con un parcial de 13-3 (52-54) a 5:27 para el final. La dinámica era ahora para la Penya que veía la puerta abierta a semifinales.

Muy cerca de la machada

A pesar de no meter triples, el Joventut creyó en la victoria a base de lucha y orgullo que no había mostrado en todo el partido. Y ese deseo de victoria les llevó a ponerse por delante con tres tiros libres de Joel Parra (59-57) a 1:04 del final.

Pero los de Carles Duran no supieron capitalizar esa pequeña renta y de nuevo errores en el triple, propició que el Tenerife acabara por sentenciar. La ironía es que Brodzianzky sí acertó el último triple pero ya fue demasiado tarde (62-64).