SKODA KAROQ

Skoda Karoq, ofensiva de calidad

El nuevo SUV de la firma checa ofrece un nivel de equipamiento tecnológico premium desde 19.700 euros

Skoda Karoq

Skoda Karoq / motor

Cuando el río suena, agua lleva. Eso deben estar pensado todos los fabricantes de automóviles del mundo para lanzarse sin paracaídas al lanzamiento frenético de más y más SUV’s. El mercado respalda su apuesta y los datos son claros, el comprador se ha decidido por este segmento que ya no está de moda, es más que eso. Ahora la decisión no parece recaer en si comprar un crossover o no, más bien en que marca, motor, equipamiento y color de techo va a llevar. Es como hablar de refresco y debatir sobre si Coca Cola light, cero o sin cafeína, la marca ya no se discute. En esto de los todocamino pasa igual, ahora la elección se complica y se suma otro rival a tener en cuenta, el Skoda Karoq. Su nombre, traducido es coche flecha, proviene de Alaska, el mismo lugar que dotó al Kodiaq de personalidad y consigue vertebrar una imagen con sentido para el nuevo SUV de la firma checa. Rápido y salvaje. Dinámico y aventurero. Eso es lo que refleja su apodo y hemos venido hasta Sicília (Italia) para poner a prueba esta evocadora promesa.

Hace unos meses tuvimos el primer contacto con el hermano pequeño del Skoda Kodiaq, del que hereda su lenguaje de diseño basado en formas geométricas con un frontal casi idéntico. Tal y como comenta la marca, los cristales han servido de inspiración para conseguir la imagen dura pero cuidada del Karoq y el juego con los blisters lo hace parecer más grande de lo que es. La zaga vuelve a recurrir a los faros con forma de C pero con una diferencia, esta vez se dividen en dos por el portón y el LED eleva la calidad tecnológica que se percibe desde el exterior.

Su interior es el de un modelo VAG, las discrepancias entre marcas son cada vez menores e incluso podemos encontrar la opción del panel de instrumentos digital, que permite cuatro configuraciones distintas: clásica, extendida, moderna y básica. En la primera de todas tenemos la distribución clásica con velocímetro y revoluciones en un círculo mientras el segundo da prioridad al mapa o programa que se desee dejando los datos en un segundo plano. La moderna pasa al uso de números digitales sustituyendo a la ajuga de toda la vida y la básica no muestra más que la información escogida, sin usar todo el panel. Muy parecido a lo estrenado por Audi y Volkswagen y sitúa al equipamiento tecnológico como la punta de lanza de este modelo. Desde su pantalla central de 8 o 9,2 pulgadas se accede al Skoda Connect, que divide los servicios de conectividad en dos: los basados en el infoentretenimiento Online y los de asistencia del Care Connect. Este último cuenta con servicios de ayuda como por ejemplo la Llamada de Emergencia Automática y acceso remoto al vehículo mediante la app Skoda Connect, explicados en el artículo anterior.

Sigue siendo el diseño más funcional del grupo alemán pero cuenta con ventajas como el sistema VarioFlex (opcional por 320 €), que consiste en que los tres asientos traseros se pueden ajustar o quitar individualmente para conseguir hasta 1.810 litros de maletero. Con todo montado su capacidad es de 521 litros pero los asientos pueden tirarse hacia delante, dejando espacio de 580 litros. El espacio en su interior es más que suficiente para una familia con niños pero que se mantenga por debajo de los 1,80 metros de altura. Sus medidas son de 4,38 metros de largo por 1,84 de ancho y 1,60 de alto y lo situarán como uno de los preferidos por su amplio espacio interior sin renunciar a un tamaño compacto.

MOTORES

Otro de los elementos de vanguardia del Skoda Kodiaq son sus bloques eficientes. El nuevo 1.5 TSI de 150 CV (el gasolina más potente) cuenta con la Tecnología Activa de Cilindros (ACT) que desconecta el segundo y tercer cilindro para ahorrar hasta medio litro a los cien kilómetros si se circula por debajo de los 130 km/h entre las 1.250 y 4.000 revoluciones por minuto. Los otros motores son los dos diésel 1.6 TDI de 115 CV y el 2.0 TDI de 150 CV y el gasolina tricilíndrico de 115 CV. Todos los propulsores se pueden combinar con cambio manual de seis velocidades o automático DSG de 7 pero tan sólo los de 150 CV (diésel y gasolina) ofrecen la tracción total como opción. Como buen vehículo aventurero sus capacidades de carga también deben ser notables y dependiendo de la motorización el Skoda Karoq puede remolcar hasta dos toneladas.

PRIMERAS IMPRESIONES

Durante nuestra prueba en Sicilia pudimos conducir ambos bloques de 150 CV y cabe destacar el consumo conseguido por el TSI ACT. Tras una ruta combinada de vía rápida y comarcal se marcó un 6,2 litros tras adelantamientos y un tramo de curvas donde activamos el modo Sport. El Skoda Karoq cuenta con un Control Dinámico del Chasis (DCC) con otros tres estilos de conducción: Confort, Eco e Individual. Lo cierto es que, como ya sucede con otros modelos del grupo Volkswagen, no hay cambios realmente sustanciales entre modos más allá de la dureza de la dirección y la suspensión al activar el más deportivo. También cuenta con un modo Off Road y otro para nieve (Snow) que desgranamos en su presentación estática pero no pudimos comprobar ayer, como es lógico en el segundo caso. El bloque diésel 1.6 de 115 CV lo probamos durante la segunda jornada y resulta más que suficiente para un conductor al uso que quiera permitirse algún que otro adelantamiento con previsión. Eso sí, nos sorprendió el ruido. A cambio hay que reconocer el trabajo de Skoda para subir de nivel sus vehículos, tanto estéticamente como tecnológicamente con un salto cualitativo muy notable en este último apartado que lo sitúa al nivel de vehículos premium en algo tan vital como los sistemas de seguridad y de asistencia a la conducción. Las diferencias entre las marcas del grupo son cada vez más indetectables y eso es una gran ventaja para Skoda.

Lo que suele diferenciar de manera clara a los vehículos de la marca checa es su interesante relación calidad-precio y esta vez no iba a ser distinto. Han querido dar una vuelta a la imagen de la firma mediante la venta de modelos más equipados y es algo que ha funcionado muy bien en su hermano mayor, el Kodiaq. Es por eso que no ofrecerán el  nivel de acabado de acceso (Active) y sólo se comercializará en Ambition y Style, con una diferencia de 2.900 euros entre ellos. Un coste que vale la pena pagar con el salto tecnológico que representa el tope de gama. Los precios del Skoda Karoq van desde los 24.210 € para el TSI 1.0 gasolina y 26.210 € para la variante diésel 1.6 TDI pero se puede conseguir ya desde 19.700 euros gracias a los descuentos de lanzamiento que incluyen unos 3.700 euros en equipamiento.