Luka Modric, contra las cuerdas en el Real Madrid

El jugador vive su temporada más complicada en el Bernabéu, con apariciones intermitentes y casi siempre alejadas de los partidos más importantes.

Atlético de Madrid - Real Madrid

Atlético de Madrid - Real Madrid / JUANJO MARTIN

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Carlo Ancelotti miró al periodista y se tomó su tiempo para responder. Demasiado tiempo incluso para él, que suele hacer de las pausas para encontrar las palabras correctas una de sus virtudes. Se carcajeó en una mezcla de resoplido y risa para luego soltar una frase llamativa. “A Luka le tengo demasiado respeto como para hacerle calentar si sé que no va a jugar”. Sucedió en Las Palmas, después del triunfo merengue, ese en el que Luka, Luka Modric, no participó ni un minuto. Tampoco salió a calentar. De ahí la pregunta y el comentario del entrenador del Real Madrid, que trató de despejar el comentario dejando en el aire que la no presencia del croata en la banda era una señal de respeto… aunque no fue capaz de tapar el papel residual que empieza a tener el Balón de Oro de 2018 en los blancos.

La cuestión es compleja. Siempre lo es despedir a una leyenda que empieza a convertirse más en jugador de exposición que en valor activo. Porque tampoco el rendimiento de Modric está ayudando. Físicamente le cuesta. Se le nota. Se vio ante el Atlético de Madrid, cuando salió al verde para controlar el partido con 1-0 para los blancos, pero no fue capaz de contener el ritmo atlético y atenuar sus propias pulsaciones. Ya en el derbi de la primera vuelta, en el Metropolitano, Ancelotti apostó por usarlo de inicio junto a Kroos y el equipo sufrió más de la cuenta.

Solo cuatro partidos completos

Fue sustituido al descanso y desde entonces ha ido teniendo un rol regresivo que ya se intuía al inicio de curso, cuando encadenó las tres primeras jornadas como suplente. Con el Real Madrid sólo ha completado cuatro partidos los 90 minutos ante Braga, Unión Berlín, Villarreal y Getafe. En el resto de sus titularidades (15 con los blancos) no ha completado el partido al completo.

Algo que contrasta con su rol en Croacia, donde no sólo es indiscutible sino insustituible. En los cinco partidos que ha disputado con su país esta temporada solo en uno fue cambiado… y lo hizo en el minuto 86. Su sueño es poder, de nuevo, liderar a los balcánicos en la Euro, donde Croacia es candidato tapado en las apuestas de fútbol de Betfair, con una probabilidad del 2,4% de ganar el título pese a que en el Mundial fue semifinalista (cayó ante Argentina) y en la anterior Euro sólo cayó en octavos y por penaltis ante España.

Renovación en el alambre

La cuestión empieza a convertirse en asunto relevante en el Real Madrid porque, como cada año desde que cumplió los 30 (cosas de la política de renovaciones merengue) su ampliación de contrato es cosa que va año a año. Comparte dilema con Kroos, que incluso ha deslizado que no descarta la retirada. Pero en cuestión de rendimientos, parece claro que el germano (34 años) tiene aún más que dar que el croata (38 años).

En el Real Madrid empieza a deslizarse que el futuro de Modric será el que él quiera, como el mismo Ancelotti comentó en rueda de prensa precisamente en la previa del partido ante el Atlético de Madrid. Con cantos de sirena constantes desde Arabia Saudí, el mediocampista suma ya once años y doce temporadas siendo futbolista merengue.

La opción de un último salto económico será seguramente objeto de debate interno, mientras en el Real Madrid saben que su rendimiento va camino de ir hacia abajo. Dudas, incógnitas y dilemas que seguramente resuelvan los minutos que jueguen en las próximas semanas y qué tipo de papel juegue en el equipo. En caso de ser optimista, con opciones de ganar títulos, podría incluso abrirle la puerta a un adiós por la puerta grande tras jugar más de 514 partidos, el 15º futbolista en la historia merengue por número de entorchados y el segundo europeo que más veces ha lucido su camiseta sólo por detrás de Benzema (648 encuentros).