MotoGP: el último baile de Rossi sin Márquez en la pista

Tras un cuarto de siglo en el Mundial de motociclismo, el nueve veces campeón del mundo Valentino Rossi pone el punto y final a su ilustre carrera en Cheste.

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Valentino Rossi se despide este fin de semana del motociclismo profesional y lo hace en un circuito que no existía cuando debutó en el Mundial allá por 1996. El italiano lo estrenó en 1999 y precisamente no guarda el mejor de los recuerdos al ser octavo en la prueba de 250cc en la que terminaría ganando el campeonato. Ese resultado fue el peor que registró ese año, pero 'El Doctor' nunca ha terminado de llevarse bien con un trazado donde apenas ha registrado dos victorias en su inmensa carrera.

Porque cuando llegue el domingo y el reloj marque las 15 horas habrá una fiesta sin parangón para celebrar la carrera de un piloto que se marcha de MotoGP con 89 victorias, 199 podios y 76 vueltas rápidas. Sus números serán difíciles de alcanzar hasta para un Marc Márquez no estará presente en su fiesta de despedida por lesión, aunque tampoco sabemos si Valentino le habría invitado al no haber superado el hecho de perder su décimo Mundial en 2015 tras dar una patada al piloto catalán.

Rossi se marcha por la puerta de atrás tras haber vivido su peor temporada como piloto en cuanto a resultados. Es cierto que se vio relegado al equipo satélite de Yamaha para intercambiar la moto con Fabio Quartararo, quien acaba de ser proclamado campeón del mundo de MotoGP con la montura que el año pasado pilotaba un Valentino que se marcha consciente de que ya no puede ir al ritmo de los jóvenes.

A sus 42 años, el italiano ha decidido no alejarse ni mucho menos de los circuitos, puesto que ha montado un equipo para la próxima temporada que competirá en MotoGP con pilotos de su máxima confianza. Al mismo tiempo, Valentino ha asegurado que no cerrará el rancho donde se reúnen muchos de los mejores del Mundial para preparar la nueva temporada con sus instalaciones aptas para el motocross y el aprendizaje de frenada en superficies extremas. Rossi, además, seguirá controlando a gran parte del paddock con su marca VR46, quien gestiona los derechos de merchadising y marketing de un alto porcentaje de pilotos de la parrilla.

Rossi espera que con el mundial totalmente decidido y nada en juego pueda firmar una gran participación tras conseguir un octavo puesto como mejor posición en una carrera esta temporada en Austria. El italiano pisó el podio por última vez en el Gran Premio de Jerez de 2020, pero desde entonces entró en un acusado declive que le ha llevado a tener que decir adiós para no manchar su leyenda.