Dos décadas de la mítica fiesta de Halloween del Betis

Resulta extraño que todavía no se haya hecho una película de este suceso. Benjamín Zarandona se encargó de expandir la popularidad de la fiesta americana de Halloween por toda España. El jugador del Betis montó una fiesta que es historia de la ciudad de Sevilla reuniendo a casi la práctica totalidad de la plantilla del Betis. De aquella noche se han contado miles de historias y muchas versiones, pero en la que todo el mundo coincide es en la aparición del empresario y presidente del club verdiblanco, Manuel Ruiz de Lopera, junto con el entrenador Juande Ramos.

Hacía escasos meses que el equipo hispalense había ascendido a Primera División y Lopera no quería que su equipo se volviese a descontrolar. Alguien le contó la que había montada en casa de Benjamín y, ni corto ni perezoso, llamó a su entrenador y ambos se presentaron pasada la medianoche por la fiesta. El presidente se llevó un disgusto de los de época al encontrarse a casi 200 de personas en el chalet del jugador. "Se nos fue de las manos. Yo sólo había invitado a 30 amigos", se defendió el jugador años después.

Lopera se puso en modo inspector de aduanas revisando la casa de arriba a abajo mientras la gente intentaba escapar de su vista. "Cuando Benjamín me vio se puso blanco y de repente empezaron a escucharse gritos y a salir gente por las ventanas debido a mi presencia. Benjamín tenía varias copas en la mano y vi cómo Denilson, que posteriormente no paraba de temblar, intentó saltar por una ventana, con varios jugadores escondidos tras las cortinas", admitió el presidente.

La secuencia que se encontró Lopera al entrar fueron varias chicas bailando en paños menores, sofás quemados por las colillas y alcohol por todas partes. "Allí estábamos en la gloria y de repente veo a Benjamín subiendo por unas escaleras con la cara desencajada diciendo que quién había invitado a Lopera", dijo Joaquín Sánchez, quien por aquel entonces era un debutante en Primera División.

El capitán recordó una conversación con Denilson, quien estuvo a punto de tirarse por una ventana para no ser pillado. "Que no me va a pagar, que no me va a pagar", decía el brasileño, mientras Joaquín intentaba quitarle la idea de lanzarse al vacío. "Hay dos metros, que te vas a matar. Déjalo que te vea y te diga lo que quiera", le espetó Joaquín, quien finalmente consiguió convencerle.

Lopera pilló a toda su plantilla, pero decidió no apartar a nadie del equipo ni tomar represalias. Finalmente el Betis consiguió la machada de clasificarse para la Copa de la UEFA para la temporada siguiente tras terminar en sexta posición en Liga. "Hombre si está aquí el niño. Muy pronto estás empezando tú", fue lo que le dijo el presidente bético a Joaquín. "Es algo que nunca olvidaré en mi vida. Menos mal que nos pilló a todos", zanjó el jugador.