FIFA The Best: sin emoción no hay gala

Cristiano ha sumado un nuevo trofeo a su palmarés

Cristiano ha sumado un nuevo trofeo a su palmarés / AFP

Pere Mas

Pere Mas

Se cumplieron los pronósticos y Cristiano se llevó el gato al agua. ¿Alguien lo dudaba? Desde luego que Messi y los demás protagonistas de las espantá azulgrana lo tenían clarísimo. ¿Qué interés tenía, pues, esta ceremonia? Prácticamente ninguno puesto que sin emoción no hay paraíso. El escenario de la gala era francamente mejorable con parte del público en una pendiente vertiginosa y otra sentados a nivel del escenario entorpeciendo los tiros de cámara. Solvente iluminación y juego de leds acompañados de una realización correcta le dieron un aire sobrio y elegante a pesar de las tres prescindibles actuaciones musicales y de unos rótulos tan futuristas como ilegibles. La conducción de Eva Longoria y Marco Schreyl no fue nada espontánea y sufrió un tiro de cámara incómodo. Ella estaba unos 20 centímetros por debajo de él generando un cierto aire de Tip y Coll. Por lo demás, demostración de poderío de la FIFA con el despliegue de astros diversos para dejarles claro a los de France Football que ellos no tienen el prestigio pero si la pasta y la capacidad de coacción, perdón, de convocatoria. Al final, ni CR7 disimuló que el factor sorpresa estaba muerto “después de lo que he ganado no tenía ninguna duda de que me llevaría el premio”. Y, evidentemente no pudo ahorrarse el puñal por la ausencia de Messi. Sin darse cuenta, así le hace aún más grande.