BMW M235i

BMW M235i, el superdeportivo que te cambiará la vida

El nivel de satisfacción, placer y disfrute del BMW M 235i sitúan a quien lo ‘pilota’ en permanente estado de felicidad.

BMW M235i

Disfruta de 326 CV de potencia y alcanza los 250 km/h. / sport

Germán Garcia

El nuevo BMW M 235i es, con 326CV de potencia y un par de 50Nm, uno de los deportivos compactos más divertidos y agradables de conducir que existen en el mercado. Un coche que te mantiene permanentemente con una sonrisa en la cara, produciendo unos niveles de satisfacción elevadísimos. El M 235i debería prescribirse médicamente para olvidarse de todos los problemas, subir la autoestima y ser feliz.

El M 235i es el modelo más potente de Serie 1 y Serie 2 de BMW, ya que aunque hay una versión 135i da seis caballos menos (320) y tiene algunas variaciones mecánicas. Lo que más sorprende del M 235i es la respuesta y reacción a las ‘órdenes’ del pedal del gas. Estéticamente las diferencias con el resto de la gama son evidentes a simple vista, ganando en agresividad y vistosidad. El sonido del coche, ya sólo arrancarlo, denota que no estamos al volante de un vehículo cualquiera, y al primer golpe de gas ya detectas que estamos hablando de un superdeportivo. Movimientos precisos, cierta dureza en la dirección y la suspensión que revelan un cuidado trabajo para convertir al M 235i en un verdadero deportivo.

En carretera y autopista no hay secretos, se mantiene con un aplomo y firmeza exquisitos, incluso a altísimas velocidades. Pero cuando empiezas a disfrutar del despliegue mecánico del coches es al circular por una carretera virada. Ahí el M 235i tiene un caracter sobresaliente. Estable, preciso, milimétrico en la entrada en curva y poderoso en la salida. Con el cambio automático el goce de la conducción es máximo, tanto por la facilidad en engranar las marchas por medio de las levas, como por la lectura que hacen los sistemas electrónicos en cada situación, detectando si estamos en una conducción deportiva y reteniendo el cambio de la marcha para no quedarnos sin potencia en medio de la curva. La respuesta al gas es potentísima, pudiendo adelantar con suma facilidad. De hecho, con el cambio automático se logra mejorar la aceleración con respecto al manual, logrando pasar de parado a 100 Km/h en sólo 4,8 segundos.

Con un par de 450Nm el empuje es otra de las cualidades brillantes, tracciona con contundencia, transmitiendo muchas sensaciones al volante. Cuenta con un diferencial posterior de deslizamiento limitado que mejora aún más esta tracción con el control de estabilidad desconectado. En resumen, el BMW M 235i es un superdeportivo de altas prestaciones, poderoso y agresivo, pero con un comportamiento noble y fácil de conducir que te cambiará la vida. ¿Y el precio? 52.724 euros.