"Elegimos a Òscar porque representa la cultura del Barça"

Bernard Caiazzo, presidente del Saint-Étienne

Bernard Caiazzo, presidente del Saint-Étienne

Josep Coves

Josep Coves

El Saint-Étienne, un gigante dormido ya que es el club que ha ganado más ligas en Francia, se ha sumado también a la moda de los entrenadores extranjeros. La Ligue 1 contará la próxima temporada con seis entrenadores foráneos, algo sin precedentes en el último cuarto de siglo y que contrasta enormemente con la 2010-11 en la que todos los equipos apostaron por técnicos franceses.

Jardim, Emery, Favre… los tres primeros clasificados contaron con entrenadores de fuera y ahora se han sumado el Saint-Étienne, el Nantes y el Lille. ¿Por qué esta tendencia?

Los técnicos franceses piensan que lo saben todo y no miran qué pasa fuera, en otros países. Tienen que preguntarse qué tipo de fútbol quieren y porqué solo hay dos entrenadores franceses trabajando en clubs de nivel. Dos que prácticamente no son franceses porque Zidane se siente más español que francés y Wenger lleva 25 años en Inglaterra.

¿Por eso el Saint-Étienne también se ha desprendido de Christope Galtier, que llevaba ocho años al frente de la primera plantilla?

Necesitábamos alguien con un carácter fuerte y que agitara la plantilla. Cuando conduces un coche con ocho años de antigüedad comienzas a tener problemas. Y esto es lo que pasaba con la plantilla. Hay jugadores que juegan y otros no y entonces la relación es complicada. Por eso era necesario un cambio.

¿En seguida pensó en Òscar?

Mire, yo tengo sangre catalana. Mi padre es de origen italiano, mi madre catalana. Y yo soy un aficionado del Barça. Sé que Òscar representa la cultura catalana y la cultura del Barça. Es el típico catalán: trabajador, humilde y creativo. Se parece a la gente de Saint-Étienne. Para que se haga una idea le diré que el día que vino aquí le propuse ir a cenar a un restaurante y ¿sabe qué me dijo?

No, cuente, cuente…

Que no podía, que tenía mucho trabajo por hacer: ver vídeos de los jugadores y del equipo, preparar no sé qué… En fin, que al final encargamos la comida y nos la tomamos en la misma oficina para no perder tiempo. Todos estamos encantados con él.

"Òscar es el típico catalán: trabajador, humilde y creativo. Se parece a la gente de Saint-Étienne"

¿Y eso que me decía de la cultura del Barça?

¡Ah sí! Que es un entrenador con el ADN Barça, partidario del fútbol ofensivo, espectacular… Sus equipos transmiten la misma imagen de fútbol moderno que el Barcelona, con otro nivel de jugadores pero el concepto está ahí.

¿Qué le ha pedido al nuevo entrenador?

Un proyecto. No le pido resultados, ni títulos, ni ir a Europa pero sí un proyecto que nos haga identificables. Que el Saint-Étienne haga un juego atractivo y ofensivo. A cambio le damos libertad total para trabajar.

Se le ve entusiasmado con Òscar…

Sí, totalmente. Él también se ilusionó mucho desde el principio para venir al Saint-Étienne y no fue difícil convencerle. Al Salzburgo tampoco, porque en definitiva trabaja para el rey de Prusia como decimos en Francia, es decir para el RB Leipzig. Hace unos días hubo una convención de clubs franceses y Gerard Houllier, que ha trabajado para el Salzburgo, me felicitó por la elección de Òscar y me dijo que hace mejor a los jugadores y que los equipos mejoran con él.

Lo malo es que en una liga en la que participa un club con el potencial económico del PSG no hay nada que hacer…

Nosotros tenemos un presupuesto similar al del Espanyol, que no puede luchar contra el Barça. Y con el PSG nos pasa lo mismo. El 5 de octubre jugaremos contra ellos en París. Sabemos que podemos luchar contra el PSG en un partido y que puedes ganarle, pero a lo largo de 38 jornadas es imposible. Nuestro objetivo tiene que ser jugar un buen fútbol.

El espectáculo por encima de los resultados.

El proyecto es practicar un juego agradable y luego acabar quinto, tercero, sexto…, pero este nunca será el objetivo. Prefiero quedar séptimo con buen fútbol que quinto jugando mal.

"Prefiero terminar séptimo con buen fútbol que quinto jugando mal" 

¿También lo comparte la afición?

Hemos hablado con los hinchas y coincidimos: para nosotros lo más importante no es jugar la Champions si no ver buen fútbol porque queremos deporte y espectáculo.

En el Geoffrey-Guichard se vive el fútbol de una manera muy intensa…

Tener una afición como la que tenemos es un orgullo. Esta última temporada los fans del Manchester United nos dijeron que la afición del Saint-Étienne es la más abierta de Europa. Nuestro público es buen conocedor del fútbol y el equipo ha respondido los últimos años. En la clasificación de los últimos cinco años, el Saint-Étienne es el cuarto mejor equipo de la Ligue 1, por detrás del PSG, Lyon y Mónaco y es el cuarto de los clubs franceses en Europa, solo superado por PSG, Mónaco y Lyon.

Ahí en Europa es donde flaquean en general los clubs franceses.

Creo que falta globalizarnos. ¿Por qué España es más fuerte que Francia en los deportes colectivos? Porque se ha globalizado más. La clave es tomar lo mejor de todas partes y a mí me ha ido muy bien con mis empresas. Esto es lo que nos falta por hacer en Francia.

¿Y como directivo futbolístico cómo es usted?

Ni yo ni ninguno de mis directivos vamos nunca a sentarnos con el entrenador para conocer qué jugadores van a jugar. Al entrenador hay que dejarle tranquilo y darle su espacio. Ya se lo dije a Òscar. ‘Un jugador no puede venir a vernos (a los directivos) si no te lo ha dicho antes a ti. No somos hinchas de los jugadores. Tú eres el único dueño de los jugadores’. El ‘boss’ es Òscar y él, que es listo, lo ha entendido porque me dijo que para que un técnico se quede ocho años aquí es que está contento.