El Barça ganaría la Copa América

EL DECLIVE DE BRASIL. En el mundo del fútbol, donde todo parece inventado, todavía queda un partido por organizar que sería un acontecimiento mundial. Un match inédito y morboso. Lo más de lo más. Lo nunca visto, el campeón de la Champions contra la selección campeona del mundo. ¿Se imaginan un choque que enfrentara al Barça con Alemania? Mientras esto no suceda, lo que sí parece claro es que el nivel de los clubs está muy por encima de las selecciones por lo que estamos viendo en la Copa América. Brasil hace años que ha iniciado un declive preocupante. Fueron eliminados del Mundial el año pasado con una goleada humillante y ahora han caído con frustración y pena ante Paraguay. Lo mismo vale para Argentina, es el quiero y no puedo, el coraje por encima del juego, la fe que hace milagros en los penaltis. El Barça que vimos en la Champions eliminando de forma consecutiva al PSG, Manchester City, Bayern y venciendo a la Juventus en la final, no tendría rival en la Copa América. El gran Messi blaugrana no se puede comparar con el de la albiceleste. Aquí tiene un equipo a su medida, allí forma parte de una selección que no tiene estilo ni forma. Con Neymar se repite la historia. Después de realizar una gran temporada en el Camp Nou, no ha conseguido su sueño de levantar un título con la canarinha y lo que es peor, ha terminado expulsado y sancionado. Algo parecido a lo que ya le pasó a Luis Suárez con Uruguay en el Mundial de Brasil. La impotencia les lleva a la desesperación.

EL CAMP NOU ES EL PARAÍSO. Viendo jugar a Argentina y Brasil como banderas del fútbol latinoamericano, todavía  valoramos más el potencial del Barça. El equipo de Luis Enrique, tanto a nivel de individualidades como de conjunto, tiene mucho más fútbol que selecciones que han sido campeonas del mundo. No hay color. El Barça del triplete ganaría la Copa América con una superioridad manifiesta. Messi se queja de lo mucho que le cuesta marcar un gol con su selección, no termina de hacer el partido redondo que busca con ahínco, le falta confirmar su condición de líder indiscutible. En el Camp Nou todo le sale fácil, sencillo y positivo, en Chile se encuentra con rivales que le marcan con una dureza que tendría que estar sancionada. En cuanto a Neymar, se ha ido triste y apenado a casa. Hace un año no acabó el campeonato por culpa de una lesión, ahora por una sanción. La única lectura positiva es que todo esto es bueno para el Barça ya que los cracks se dan cuenta de que el Camp Nou es el paraíso para los mejores.