Esto es lo que hay

El Madrid juega con doce

Joan Mª Batlle

Remontada imposible. La Liga sigue marcada por el guión que escriben los árbitros. El Madrid volvió a golear en el Bernabéu, esta vez al Racing y otra vez con ayuda arbitral. Ya sé que con un 4-0 hablar de árbitros puede parecer gratuito, pero cuando la misma historia se repite semana tras semana, no lo es, caramba, no lo es. Lo de ayer, y lo de la semana pasada ante el Levante y más atrás lo del Athletic no son lo mismo que la mano de Pepe en Getafe o aquel gol anulado al Mallorca por el fuera de juego más inexistente de los que pueden pitarse, o la mano de Higuaín en Valencia, pero son indicativos de la tendencia que acabará decidiendo la Liga. Esas tres jugadas fueron robos directos, las del Bernabéu son empujones hacia el título.

El Madrid no debería necesitar esas ayudas extras, pero ahí están, por si acaso. Los árbitros saben muy bien lo que han de pitar y sobre todo, el momento en el que hay que pitarlo. Como los dos penaltis, uno con expulsión incluida, nada más empezar la segunda parte con empate a uno ante el Athletic. O el penalti, también con expulsión, al filo del descanso contra el Levante. O la expulsión y el segundo gol madridista en fuera de juego ayer frente al Racing en el minuto 45. Todo momentos psicológicos, ayudas decisivas que luego se pretenden ignorar con las goleadas finales.

Mal pintan las cosas para el Barça. Hoy solo le vale ganar, como de aquí a final de temporada. Pero si el Madrid sigue jugando con doce todos los partidos, el milagro de la remontada será imposible.