'Projecte Àfrica' ya tiene cuatro escuelas

La Fundació viste a 600 niños africanos de blanquiazul

Fútbol y educación son inseparables en este proyecto. En África les enseñan castellano y catalán

Juan Carlos Gracia

El Espanyol viste diariamente de blanquiazul a 600 niños africanos, distribuidos en las cuatro escuelas que tiene en marcha en Nigeria (2), Costa de Marfil y Senegal, y que en el futuro se verán ampliadas con otro centro en Marruecos y en Guinea Ecuatorial.

“Solo el 0,001% de los jóvenes llegarán a ser futbolistas profesionales. Por eso nuestro proyecto va más lejos. Queremos formar personas, que en el futuro vistan la camiseta de la inteligencia”, señaló el vicepresidente ejecutivo de la Fundació, Antoni Fernández Teixidó. La Fundació hizo ayer un resumen de todos sus proyectos, donde el 'Projecte Àfrica' es el punto central junto a las XEF (Xarxa d'Escoles de Futbol del Espanyol). Ya son cinco XEF ¿Lloret, Sant Feliu, Sant Cugat, Terres de l¿Ebre, más las dos de verano en Menorca¿ que suman un total de 370 niños. Se está en contacto para abrir dos centros más en Castelldefels y en Badalona.

En total, pues, casi 1.000 niños catalanes y africanos forman parte de un proyecto solidario, de formación de personas, sin contar la escuela de fútbol de Sant Adrià. Los números llenan de satisfacción a los patronos.

Un paso al frente

La Fundació -no el club- invierten anualmente entre 20.000 y 25.000 euros en Africa, pero hace unos meses ha puesto en marcha la maquinaria para lograr nuevos ingresos que permitan llevar a cabos trabajos de rehabilitación en las instalaciones que utilizan las escuelas en África. Aquí es básica la colaboración con los proyectos sociales de 'Banca Cívica', pues el 'Projecte Àfrica' es uno de los que se pueden elegir. El año pasado ya hubo 62 aportaciones, según se destaca en el informe anual de la Fundació.

“La Fundació dota de alma al proyecto deportivo del Espanyol”, apuntó Fernández Teixidó. Y es que como añadió el vicepresidente Emilio Álvarez “hemos ido a Africa con un proyecto, no con dinero”. Un proyecto que ha permitido, por ejemplo, que los niños para jugar deben acudir a la escuela. Una escuela donde reciben clases de castellano y catalán.