Preguntas con respuesta

¿Villa en ataque?¿Alves, extremo?¿Defensa de tres?

La revolución táctica que plantea el cuerpo técnico del Barça para recibir al Milan pasa por tres puntos clave que conviene analizar

Jordi Gil

- ¿Villa merece confianza como goleador?

El Barça tiene una misión principal y muy clara en el partido contra el Milan: marcar goles. Dos como mínimo para igualar la eliminatoria y puede ser que cuatro en caso de que el conjunto italiano anote algún tanto. Una opción probable dado los riesgos que va a tomar el equipo barcelonista. Por tanto, si necesitas goles, debes apostar por el futbolista más oportunista, el más habituado a vivir en el área, a rematar de primera, a recoger rechaces, capaz de meter la pierna en un barullo con poco espacio... y este es David Villa. Messi se siente más cómodo entrando por sorpresa y el asturiano, aunque se ha escorado a la izquierda en los últimos tiempos, conoce como nadie en la plantilla los secretos del delantero centro.

El Barça debe ejercer una gran presión desde el primer momento y meter constantes balones en el área para fomentar la incertidumbre en la defensa milanista. Villa será la referencia para pelear estos balones. Ya lleva doce goles esta temporada (siete en la Liga y cinco en la Copa), por lo que mantiene el olfato y el instinto depredador.

- ¿Alves puede funcionar como extremo?

Dani Alves ha ofrecido su mejor rendimiento en el  Barça como lateral derecho con todo el campo por delante para explotar su fuerza física. Evidentemente, como extremo está limitado por recorrer únicamente de medio campo hacia arriba. Pierde el factor sorpresa, pero es la pieza que permite un mayor equilibro. Es decir, ubicado de extremo nato no marcará la diferencia por potencia, sino por la calidad de sus centros. Y su misión será poner balones con la misma precisión que, por ejemplo, sirvió para que Villa marcara de cabeza ante el Sevilla.

Su virtud de poder equilibrar el juego del equipo llegaría si el partido se pone de cara. Entonces, Alves puede volver atrás para formar la línea de cuatro, sujetar a El Shaarawy y dejar que sea el Milan quien tenga que salir de la cueva.

- ¿La defensa de tres es necesaria?

Todo apunta a que Massimiliano Allegri volverá a apostar por el `catenaccio¿ absoluto plasmado con un dispositivo táctico de cuatro defensas, seis futbolistas acomulados en el centro del campo y ningún jugador descolgado claramente en punta. Todos correrán detrás del balón y, si no existen delanteros que cubrir, no es necesario poner más defensas de la cuenta. Una lógica `cruyffista¿ y que te puede permitir abrir el partido en un choque excepcional. Puyol y Alba deben ser los encargados de jugársela en el uno contra uno en caso de que el Milan sea capaz de hilvanar algún contragolpe. Aunque contra el Madrid sufrieron en esta misión, los delanteros milanistas no son tan letales ni gozan de tanta calidad para regatear en carrera, por lo que las prestaciones del capitán y del exvalencianista deben ser suficientes. Junto a ellos, como líder, se situará Gerard Piqué, que efectuará las funciones de libre. Será el encargado de realizar las ayudas defensivas a sus compañeros y será el primero en iniciar las jugadas, ya sea en corto o en largo.