Verratti fulmina a Di Campli y ficha a Mino Raiola

Mino Raiola, en una imagen de archivo

Mino Raiola, en una imagen de archivo / AFP

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Marco Verratti se aleja un poco más del Barça. El que venía siendo el culebrón del verano parece ir resolviéndose lentamente y, por desgracia para el conjunto azulgrana, lo hace dejando el fichaje del italiano como una misión prácticamente imposible. Gran parte de las esperanzas culés pasaban por la presión que el jugador estuviera dispuesto a hacer al PSG, la cual se espera que disminuya tras el último movimiento de Marco: se ha desvinculado de Donato Di Campli y su representante desde ayer mismo ya es el polémico Mino Raiola.

En las últimas semanas, y en plena efervescencia de las informaciones que acercaban al jugador a Can Barça, desde Italia ya informaron de una supuesta pérdida de feeling entre Verratti y Di Campli. Ante los rumores, el agente colgó en las redes sociales una foto de ambos brindando y la acompañó de una frase: “Una cosa sola”. Muchos interpretaron la escena como la demostración de que todo iba viento en popa entre uno y otro, incluso hubo quien vio en tal imagen la demostración de que ambos estaban dispuestos a todo para fichar por el Barcelona.

Un mes y cuatro días más tarde de dicha publicación, y con las ansiadas negociaciones entre Barça y PSG por el italiano todavía por llegar, el centrocampista sorprendió a todos anunciando su desvinculación de Di Campli. “Comunico que con efecto inmediato la única persona legitimada para representar mis intereses deportivos es el señor Mino Raiola. Agradezco al señor Di Campli el trabajo realizado hasta hoy, y le transmito mi profunda estima”, escribió el jugador del PSG en Instagram.

Hay que recordar que el propio Verratti contradijo a Di Campli tras asegurar éste que Marco estaba como en una prisión. El jugador pidió disculpas al club parisino, lo que ‘anunciaba’ entre líneas lo que ahora ha sucedido oficialmente: el divorcio total entre el jugador y su agente.

En clave azulgrana, la incorporación de Verratti a la cartera de Mino Raiola es, a priori, una mala noticia. Desde la etapa de Zlatan Ibrahimovic en el Barça que las relaciones entre el controvertido agente y el club no son, ni mucho menos, las mejores. De hecho, el movimiento de Verratti se entiende como el primero de varios pasos que acabarán con la renovación del centrocampista con un PSG que en ningún momento ha dado síntomas de flaqueza ante las embestidas del Barça. La secretaría técnica culé no arroja la toalla pero sabe que la operación es, cada vez más, un reto prácticamente imposible de ganar.