Barça B, 4 - Racing, 1

Recital de Deulofeu contra el Racing

El Barça B, comandado por un excelso Gerard Deulofeu, autor de dos goles y una asistencia, destrozó este domingo sin compasión a un ramplón Racing de Santander (4-1)

EFE

El equipo cántabro fue un juguete roto sin opción alguna en noventa minutos. Nada pareció entrever que Fabri se jugara su puesto. El 4-1 visitante lubricó aún más el dominio culé, y aún pudo agradecer irse al descanso con solo tres goles en contra, cuando Sotres salvaba a su equipo de una goleada escandalosa.

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Liga Adelante

4
1
Alineaciones
Barça B
Masip; Patric, Lombán, Planas, Grimaldo (Balliu, m.46); Gustavo Ledes, Rafinha, Sergi Roberto; Deulofeu (Araujo, m.35), Lobato (Joan Román, m.11) y Luis Alberto.
Racing de Santander
Sotres; Francis, Goikoetxea, Rochela, Docal; Jorge Alonso, Jairo, Óscar Pérez (Gullón, m.51), Dorca, Bouazza (Gai Assulin, m.39); y Andrija (Koné, m.20).

Ya en la primera media hora había sentenciado el Barça B el partido. Al frente del maremoto azulgrana, un Luis Alberto pletórico como falso nueve en el arranque. Omnipresente en todos los ataques y atormentando al meta rival desde cualquier rincón del área. El delantero andaluz estrelló un balón en el poste en el primer ataque del filial, augurio de lo que se avecinaba. Los remates a bocajarro se sucedían cada pocos minutos en botas de los locales. El Racing apenas inquietó a Masip en un par de ocasiones.

En la triste oda al derrumbamiento cántabro, Bouazza fue el señalado. Al cuarto de hora perdió un balón y, al tratar de recuperarlo, barrió al lateral Patric en el área. Ni siquiera protestó. Deulofeu no perdonó desde el punto de penalti (1-0). Su técnico no esperó al descanso y, cuando restaban cinco minutos, quitó al francoargelino y dio entrada en su lugar al exazulgrana Gai Assulin, recibido con una ovación del Miniestadi, hoy con su mejor entrada. Bouazza se marchó directo al vestuario, visiblemente enojado. Su equipo entonces ya perdía por dos tantos, después de un zarpazo de Lobato que, en una excelente jugada personal, había ampliado el marcador a la media hora. Pero mejor aún fue lo que tenía guardado Deulofeu en la manga. Otra más en lo que va de curso.

Hace no muchos años, Assulin aspiraba a ser el heredero futuro de Messi en el Camp Nou, pero es ahora Deulofeu quien reclama ese trono. En la última jugada del primer tiempo, el mago de Riudarenes transformó en auténticos conos a sus rivales. Con varias gambetas imposibles en la frontal del área, dejó atrás a todo defensa que se cruzaba en su camino, incluido el portero (3-0). El extremo cerró una actuación para enmarcar cuando encontró otra grieta en el área y asistió tras el descanso a otro depredador del filial, Luis Alberto (4-0), quien suma ya siete goles.

Tan desastroso fue el encuentro visitante que incluso el gol del honor lo marcó sin querer. Pocos minutos después, en un desajuste defensivo y una jugada sin apenas peligro, un defensa local despejó el balón y el rebote en Koné acabó traspasando la línea (4-1). Fue la mínima e involuntaria oposición que ofreció el Racing, en un partido con una sola amonestación, limpio y tranquilo, lejos de la tensión que supone la cercanía del abismo. Ante la deserción cántabra, el futuro de su técnico parece tener las horas contadas.