El Barça quiere "¡Copa, Liga y Champions!"

Es cuestión de fe y esta ha vuelto al vestuario del Barça. La plantilla azulgrana tiene claro que ya ha pasado su peor bache de la temporada y que llegan al momento decisivo en el mejor momento de forma. Hay euforia contenida porque el fútbol ha vuelto al equipo y sensación de que están preparados para lograr el triplete si la suerte les acompaña en este tramo final. El grito de “Copa, Liga y Champions” que tanto sonó en el vestuario en la etapa de Pep Guardiola ha vuelto a instalarse en la mente de unos futbolistas que vuelven a verse capaces de todo.

El Barça ha cambiado y se ha dado un necesario baño de autoestima. Los propios futbolistas tenían claro que no podían seguir por el mismo camino que hace unas semanas y se conjuraron para olvidar polémicas e ir todos a una hasta el 30 de junio. No habrá ni desplantes ni malas caras. Solo una lucha común por el objetivo de los títulos y con Leo Messi como gran estandarte para conseguirlos. El argentino se ha cansado de perder competiciones y está poniendo toda la carne en el asador para que el Barça recupere el trono. Sus últimas actuaciones invitan al optimismo.

Pero no solo Messi. La plantilla es consciente de que todos están en el mejor momento físico de la temporada. La doble victoria ante el Atlético de Madrid ha significado un antes y un después por la superioridad demostrada en el terreno de juego. Jugadores como Alves, Piqué, Busquets o Iniesta han vuelto a recuperar su mejor tono y, difícilmente, lo perderán hasta el final. Era básico recuperar al bloque de jugadores indiscutibles y Luis Enrique lo ha conseguido. El Barça está fresco y los jugadores se sienten cómodos y seguros en el campo. Muestra de ello es la fortaleza defensiva que están demostrando. Este Barça es mucho más seguro atrás y ha comenzado a carburar arriba con solvencia. El tridente ya encuentra sus espacios y solo falta que Luis Suárez afine la puntería, algo que no dudan dentro del vestuario. Es más, consideran que el uruguayo será decisivo en este final de temporada.

La plantilla ha recuperado la sonrisa, la fe y la ambición. Incluso el ambiente ha mejorado, aunque todos quieren mantener la calma y hay concentración máxima para el duelo del próximo miércoles en Copa ante el Atlético. Técnicos y jugadores creen que puede ser el partido que marque toda la temporada y que no se puede fallar. Con el 1-0 del partido de ida son claros favoritos, pero deben demostrarlo en el campo. Si pasan, el primer título estará casi en el saco porque los rivales que siguen en liza en esta competición están a años luz del Barça. Ganar al Atlético aseguraría casi una primera final y serviría para afrontar el próximo y decisivo mes de competición con la máxima tranquilidad.

Además, los futbolistas aspiran a luchar por la Liga hasta el final. Ante el Depor dejaron claro que la crisis ha pasado a la historia y que están en disposición de dejarse muy pocos puntos en la segunda vuelta del campeonato. El claro objetivo es intentar presionar al Real Madrid e intentar superarlo en el duelo cara a cara del Camp Nou. Piensan que los blancos fallarán y que ellos estarán ahí. Un vestuario que hace poco miraba con la cabeza baja y que en tres semanas se ha conjurado para ganarlo todo. Igual no lo consiguen, pero lo van a luchar.