El Veszprem dio la campanada y jugará la final de Champions League contra el Barça

Por segunda vez desde que la Final Four de la Champions se instaló en el Lanxess Arena de Colonia, la gran final de este domingo (18.00 horas) no tendrá equipos alemanes y el gran culpable es el MKB-MVM Veszprem, que dejó en la cuneta al THW Kiel gracias a una sensacional segunda mitad. Con el internacional español Chema Rodríguez y los exazulgranas Laszlo Nagy y Cristian Ugalde en sus filas, el equipo que dirige el mítico exjugador del ‘Dream Team’ Antonio Carlos Ortega se merendó al campeón alemán y presentó sus credenciales al título con su meta Mirko Alilovic en plan estelar (el titular Ronald Mikler dejó el partido tras su 0/7 inicial)

El Veszprem demostró que es un equipazo y el Barça tendrá que jugar a tope durante los 60 minutos para conquistar su novena Copa de Europa. Al descanso se llegó con empate a 13 después de que los húngaros dilapidaran una renta de tres goles a falta de seis minutos. Tras el descanso, el Kiel fue perdiendo fuelle y varios contragolpes propiciados por las intervenciones de Alilovic provocaron una brecha casi definitiva en el marcador elevada a seis goles tras dos ‘dianas’ seguidas de Chema Rodríguez.

Sin embargo, el Kiel reaccionó con el catalán Joan Cañellas al mando de las operaciones y llegó a situarse 25-27 a falta de seis minutos. Sin embargo, Alilovic seguía de dulce y frenó las ilusiones de un Lanxess Arena que clamó contra varias decisiones arbitrales… Parece que por estos lares no están demasiado acostumbrados a que los colegiados impartan justicia. El caso es que el campeón magiar se impuso por 27-31 y… será el último escollo del Barça en esta Champions.