Naima Ait Alibou, nacida en la provincia de Zargora (Marruecos), llegó a Vilafranca del Penedés cuando tenía poco más de dos años.
Valora el presente y el pasado. “No lo hubiese podido hacer de mejor manera”. Hoy, Naima sueña a lo grande. Y no es para menos. Viene de brillar el pasado domingo en Atapuerca donde fue la primera española en el considerado mejor cross del mundo, desbancando a rivales de entidad y ganando su pasaporte directo para el Campeonato de Europa de Turín del próximo 11 de diciembre.
Naima se ha convertido en una de las mejores especialistas españolas en cross del momento. ¿Suena bien?
Sí, muy bien.
Hiciste unos metros de infarto con un cambio a falta de 1000 metros. ¿No te temblaron las piernas al tirar ese órdago?
Las rivales eran muy fuertes. Íbamos en un grupo compacto. Sabía que estaba bien de forma y solo tenía que confiar. Es cierto que el cambio no lo hice en la mejor parte del circuito ya que teníamos viento en contra. Fue una decisión momentánea y, al final, lo que me llevó a conseguir este puesto.
Lo hiciste ante rivales de talla olímpica.
Sí, sabía que estaban en juego las plazas del europeo y que a pesar del cambio de ritmo ellas acabarían muy fuertes. Por suerte, pude llegar a meta con una satisfacción enorme.
Fue un final de carrera maravilloso.
Da gusto verlo.
¿Cómo empezaste a correr?
De pequeños siempre hemos sido hiperactivos. Nos invitaban en el colegio a participar en carreras y siempre quedábamos delante. Nuestro primer entrenador, Toni Santiesteban, nos vio y empezamos en la escuela del Esportiu Penedés. Así empezó todo.
Lahcen, tu hermano mayor, es también un corredor portentoso que ha pasado por un periplo de lesiones. Los últimos años está recuperando su mejor versión. ¿Crees que le servirá de estímulo ver ahora a su hermana en lo que se conoce como la “élite”?
Sí, él ha tenido la mala suerte de pasar por lesiones, que son parte del deporte. Para mí siempre ha sido un referente, tomará ejemplo de superación y sacará esta motivación. Es capaz de conseguir cualquier cosa que se proponga, tiene calidad de sobra y pronto le llegará su momento.
¿Algún deportista más en la familia?
Lahcen y yo hacemos hacemos atletismo y nuestro hermano pequeño Mustafa se dedica al fútbol.
En 2016 tuvimos la suerte de conocerte en las pistas de Vilafranca del Penedés bajo las órdenes de Maria Carbó, tu entrenadora en ese momento. Tenías 17 años. ¿qué te queda de esa época?
Con María hemos pasado muchos años, me ha visto crecer, mis peores momentos…me quedo con todo, la experiencia de estar con ella, de crecer, del grupo…Al final sí que es cierto que como deportista puedes sentirte algo estancada a nivel de resultados y fue cuando tomé la decisión de hacer un cambio importante en mi carrera y pasar a manos de Fernando García “Phondy”.
Seis años después, dos de los atletas que entrenabais bajo las órdenes de Maria Carbó, Abdessamad Oukhelfen y tú, fuisteis los primeros españoles en Atapuerca.
Así es. Ahora mi metodología es diferente, cada atleta es un mundo distinto y, bueno, creo que este cambio me ha venido fenomenal. No lo hubiese podido hacer de mejor manera.
¿Phondy es un entrenador que te hace soñar a lo grande?
Sin duda.
¿Cómo es su día a día?
Solemos hacer alguna sesión de mañana y por las tardes depende lo que toque: sesión de fuerza, series…en general suele ser como cualquier otra planificación.
¿Te dedicas profesionalmente?
Sí, he intentado dedicarme profesionalmente desde toda mi carrera pero al final con los estudios y demás es más difícil de compaginar. Ahora tengo más tiempo para entrenar y creo que me ha ayudado a llegar al nivel profesional. La adaptación de los entrenamientos, la continuidad, porque hasta hace poco siempre arrastraba lesiones. Enlazar entrenamiento me ha hecho estar más fuerte.
¿Cómo de duro ha sido el camino de Naima para alcanzar este nivel?
Duro. He tenido más malos momentos que buenos lamentablemente. Entrenas y lo das todo y luego no ves resultados después de tantos entrenamientos, es muy muy frustrante. Si algo puedo destacar de mí es la capacidad de sufrimiento y superación, el deporte en general es mental y ser capaz de superar estas frustraciones siempre pensando en positivo es lo que al final te hace avanzar.
Ahora empieza lo mejor.
Esperemos que sí.
¿En qué distancia sueña Naima en Paris 2024, 800, 1500 o 5000?
Es una pregunta difícil, actualmente soy especialista en 1500 pero no descarto en un futuro correr el 5000 aunque de momento hay Naima en 1500 para rato.
