Un Real Madrid serio, concentrado y muy solidario se ha llevado los tres puntos en el Sánchez Pizjuán y se rearma anímicamente de cara al trascendental enfrentamiento del próximo miércoles de Champions League contra el Borussia Moenchengladbach, donde el conjunto de Zidane se juega su futuro en la competición europea. El equipo blanco toma aire en un momento muy delicado tras los últimos resultados que arrastraba y aunque su juego sigue dejando muchas incógnitas, ha recuperado la seguridad que le permitió proclamarse campeón en la pasada edición de LaLiga Santander. También tuvo ese factor de fortuna pues el único tanto del match fue un autogol de Bono, que no tuvo su mejor tarde.

El Madrid saca petróleo de un autogol de Bono (leer noticia)