Bajmut sigue resistiendo a pesar de los incontables esfuerzos rusos por hacerse con ella. El presidente ucraniano, ha asegurado que ellos van a seguir luchando. No se ha planteado en ningún momento una retirada táctica, solo no retroceder y reforzar. Agotar al enemigo y destruir su armamento. Ese es su objetivo para defender una ciudad que está ya prácticamente irreconocible, pero que continúa aumentando el desgaste del Kremlin, que no logra tomar el control en ella.El jefe de los mercenarios Wagner ha vuelto a acusar de traición al ministro ruso de Defensa, por el retraso en el prometido envío de munición y ha alertado de que, si por la falta de suministro las tropas rusas tienen que retirarse de la urbe, se vendría abajo todo el frente de Donetsk. Algo que militares, tropas y autoridades ucranianas, que no han abandonado, según Zelenski, ninguna parte del país, esperan que ocurra para que Bajmut siga siendo suya.