Alcaraz, el mejor regalo

El murciano, que arrancó el año en el puesto 32, ha finalizado 2022 como número uno, y con su primer título de Grand Slam en las vitrinas

Con su victoria en Río de Janeiro se convirtió en el más joven en ganar un torneo de categoría 500

Carlos Alcaraz, con el trofeo que le acredita como número uno

Carlos Alcaraz, con el trofeo que le acredita como número uno

Cristina Moreno

Cuando arrancó 2022, poco podía esperar Carlos Alcaraz que el año terminara con el número uno del ranking ATP bajo el brazo y el primer título de Grand Slam en sus vitrinas.

El murciano arrancó el curso en la posición 32 del ranking, un ascenso más que meteórico, teniendo en cuenta que en 2019 cerró en el puesto 492 de la tabla. Aspiraba a un ‘Top-15’ Carlitos, pero su trayectoria le llevó a estar mucho más arriba. En la cima, como el tenista más joven de la historia en alcanzar el número uno, superando al estadounidense Pete Sampras.

Un hito doble, pues esa posición llegó para el de El Palmar tras conquistar en Nueva York el primer Grand Slam de su corta pero intensa carrera. Con 19 años se plantó en la final del Grand Slam estadounidense y se impuso al noruego Casper Ruud en un épico partido a cuatro sets. 

Un duelo que mantuvo pegados a las pantallas a miles de aficionados, a El Palmar entero, para ver cómo Carlitos levantaba su primer gran trofeo. “Todavía no asimilo lo que hecho ni la magnitud que tiene”, decía el joven murciano unos días después de su gran conquista. Mucho que asimilar, desde luego, y un objetivo claro: mantenerse. No solo en la cima, sino también siendo él mismo. “Que sepáis que voy a ser el mismo chico de siempre, el que habéis conocido desde siempre y espero que sea el primer (grande) de muchos”, aseguraba entonces.

A su lado en este periplo ha estado su técnico, un Juan Carlos Ferrero, que ha sido gran artífice de su éxito y de que continúe siendo ese chico de sonrisa permanente, exigiéndole para sacar a relucir todo su potencial.

La temporada arrancó para Carlos Alcaraz al otro lado del mundo, eliminado en tercera ronda del Abierto de Australia por Matteo Berrettini. Nada fuera de lo previsto, aunque lo mejor estaba aún por llegar.  

Cosecha de récords

Y no se iba a hacer esperar mucho. El murciano conquistó su primera victoria en el ATP 500 de Río de Janeiro, el mismo donde un año antes había cosechado su primera victoria en un torneo ATP. Alcaraz venció en la final a todo un veterano como Diego Schwartzman por 6-4 y 6-2, convirtiéndose en el más joven en ganar un torneo de esta categoría, relegando a Jannik Sinner, quien poseía ese título tras su victoria en Washington en 2021. Primer título y primer récord.

Después llegó Indian Wells, con una épica semifinal en la que acabó sucumbiendo ante Rafa Nadal. 

La derrota no mermó a Alcaraz en su gira americana y unos días después, acabó alzándose con el título en Miami, tras ganar a Casper Ruud en la final. Con 18 años y 333 días, no solo era el más joven en conquistar el título, sino también el primer tenista español en colocarlo en su palmarés.

Estaba en racha el palmareño, que pagó el esfuerzo cayendo en primer ronda en Montecarlo, en el inicio de la temporada en tierra batida. Un pequeño traspiés que lo llevó con más fuerza a Barcelona, otro ATP 500 que añadiría a su cuenta, tras superar a Tsitsipas y De Miñaur, entre otros, y doblegar a Pablo Carreño en la final para relevar a Rafa Nadal del trono barcelonés. 

La racha se amplió hasta el Mutua Madrid Open, de categoría 1.000, donde se alzó con la victoria tras superar a Alexander Zverev en la final. El alemán se vengaría después imponiéndose en los cuartos de final de un Roland Garros en el que se impodría Rafa Nadal. En Wimblendon quedó apeado en octavos y cedió en las finales de Hamburgo y Umag ante los italianos Musetti y Sinner, respectivamente. 

Primer Grand Slam

Pero lo mejor estaba por llegar. Tras pasar sin pena ni gloria por Washington y Cincinatti, el murciano se enfrentaba al último grande del curso, el US Open. Superó a Cilic, a Tiafoe, a Sinner y en la lucha por el título a Casper Ruud.

Unas semanas después, en el Masters 1.000 de París llegó el parón. Una lesión abdominal le obligó a perderse el final de temporada, y de paso, a poner en riesgo el número uno. Pero ni Rafa Nadal, ni Stefanos Tsitsipas, los dos únicos que podían adelantar a Alcaraz con una buena actuación en las Finales ATP, pudieron relegarlo.

Número uno, cuatro títulos y una corona de Grand Slam. Una temporada al alcance de muy pocos y que se ha ganado los elogios de todos. “Puede conseguir cosas muy importantes y marcar una época”, sentenció Nadal. 2023 ya espera.