Análisis Xiaomi Mi TV P1 55": El nuevo referente dentro de la gama media

Xiaomi lleva años consolidándose como una de las marcas líder en España, principalmente debido a sus productos en numerosos campos de la tecnología. Si bien es cierto que, a día de hoy es raro no encontrarte con una persona que no tenga un teléfono de Xiaomi en el bolsillo, la firma no se conforma con eso. Y es que desde hace un tiempo se ha introducido en el sector de la televisión, ofreciendo un catálogo bastante destacado de televisores. Ya lo demostraba con la Xiaomi Mi TV 4S, un producto que se colaba por la gama media para dar guerra a sus competidores. En 2021 la compañía ha ampliado su catálogo, teniendo además de televisores de gama media, un competidor bastante digno dentro del terreno de la gama alta: La Xiaomi Mi TV Q1. Aunque de ese televisor quizás hablemos en otra ocasión. Hoy vamos a contaros nuestra experiencia con el que se considera el sucesor del Xiaomi Mi TV 4S. Hablamos del Xiaomi Mi TV P1. Con una nueva línea estratégica, la compañía ahora intentará satisfacer a todo tipo de público en este sector.

Como en casi todos los sectores, a la hora de escoger un televisor también tenemos un sinfín de posibilidades, dependiendo siempre de nuestras necesidades. En el caso de la Xiaomi Mi TV P1 encontramos un avance coherente y sin ser demasiado agresivo en comparación a la Mi TV 4S. Eso sí, encontramos ciertas características que se diferencian de la anterior mencionada, tanto a nivel de diseño como en funciones internas. Antes de hablar de ella en profundidad os dejamos una tabla que resume las especificaciones técnicas de este televisor.

DISEÑO ELEGANTE PERO MATERIALES "MENOS PREMIUM"

El diseño de este televisor puede no ser para todos los gustos. Es extraño, puesto que si bien la Mi TV 4S ofrecía un diseño mucho más estético y minimalista, aquí han apostado por materiales de fabricación que dan la sensación de ser ‘menos premium’. Hablamos de un plástico negro brillante que rodea toda la superficie del panel y las patas. Parece ser que desde Xiaomi han reservado ese tipo de materiales para el modelo Q1. Especulando sobre este tema, es posible que la compañía haya recortado en este apartado para incluir avances en cuanto a la calidad del panel y características. No obstante, se trata de algo que no podemos saber con certeza.

Tampoco hay que malinterpretar el texto. El diseño de este televisor no es una calamidad, pero si se hubiera agradecido que el televisor incorporara materiales algo más confiables. En cuanto al diseño general, se trata de un televisor con bordes estrechos y con un panel apoyado en dos patas, un formato que llevamos viendo tiempo dentro de la gama media. La parte trasera tiene algo más de culo, por lo que no es un televisor que pueda considerarse ‘fino’. Una de sus características principales, el Asistente de Google, lo podemos silenciar de manera física a través de una pestaña ubicada en la parte inferior del televisor. De esta manera, la televisión no reaccionará al comando de ‘Ok Google’ para garantizar nuestra privacidad. El hecho de incluir esta función física daña en cierta medida el diseño del televisor, ya que aparecen unas luces al frente que pueden ser molestas a la hora de visualizar cualquier contenido en él.

En cuanto al mando a distancia, su diseño sigue la línea de a lo que nos ha acostumbrado Xiaomi. De color negro y con botones recubiertos de silicona, se trata de un mando funcional que dispone además de botones especiales para Netflix y Prime Video, para así acceder a estos servicios de streaming apretando tan solo un botón. Además, es compatible con el Asistente de Google, e incluso Alexa.

CALIDAD DE IMAGEN NOTABLE, AUNQUE SONIDO SIN MEJORAS

Yendo a uno de los temas más destacados a tratar en este análisis, lo cierto es que hay cambios muy de agradecer en cuanto al panel que monta este televisor. En el Mi TV 4S nos encontrábamos una pantalla IPS fabricada por LG que daba muy buenas sensaciones por el precio al que se encontraba ese televisor a la venta. Sin embargo, quizás era en contraste donde más cojeaba dicha televisión. Era normal, ya que además de contar con la tecnología IPS, la cual no es muy amigable con el contraste, tampoco encontrábamos tecnologías exclusivas para hacer frente a esta situación. En la Xiaomi Mi TV P1 se apuesta por un panel de tecnología VA, por lo que aumenta el rango de contraste a costa de disminuir los ángulos de visión. Está claro que la compañía ha querido optar por ofrecer unos negros con más cuerpo y profundidad, sin contar eso sí, con las tecnologías que nos ofrecen las televisiones de gama alta y que dependen de la inteligencia artificial para lograr los negros más profundos. Así pues, nos encontramos en este caso un panel 4K UHD a 60Hz de frecuencia y capaz de reproducir el 94% de la gama de colores DCI-P3. Esto lo deja en un panel que previo a su calibración es bastante aceptable. Además, en este modelo Xiaomi se ha decantado al fin por traer el HDR, siendo compatible con HDR10+ y Dolby Vision. Eso sí, quizás el brillo máximo de la televisión no acompañe de manera eficaz a estas tecnologías, ofreciendo así un rendimiento algo por debajo en cuanto a visionado de contenidos HDR. No obstante, Xiaomi ha conseguido un buen avance en este televisor en cuanto a calidad de imagen, y el salto es de agradecer.

En cuanto al sonido, Xiaomi no ha realizado demasiados avances. Si bien la Mi TV 4S disponía de un apartado sonoro bastante mediocre, la Mi TV P1 sigue esa línea de tendencia. Obtenemos 2 altavoces de 10W ahora compatibles con Dolby Audio y DTS-HD. Nuestra recomendación sería acompañar este televisor con una barra de sonido, ya que ganaremos bastante a la hora de ver cualquier tipo de contenido.

En lo que respecta a videojuegos, si bien ofrece un buen rendimiento, hay ciertas carencias que impiden disfrutar de los últimos juegos en su máximo esplendor. Y es que aunque sea compatible con HDMI 2.1, estamos capados a 60Hz, por lo que ese estándar HDMI viene de manera incompleta. En cuanto a la latencia, sin ser un televisor puntero en este apartado, es una característica de la que podemos estar tranquilos, ya que todos los puertos incluyen ALLM (Modo Automático de Baja Latencia).

ANDROID TV DE SERIE

Sin duda una de las bondades por las que mucha gente se decanta por los televisores Xiaomi es su compatibilidad con Android TV. En este caso nos encontramos con la versión Android 10 de serie, pudiendo disfrutar de la descarga de todo tipo de aplicaciones, Chromecast incluido, el Asistente de Google, y una interfaz bastante limpia y cuidada. Disponer de un televisor con Android ofrece una serie de ventajas para los usuarios, sobre todo si ya poseen un terminal Android. Además de la capa de Android, Xiaomi ofrece Patchwall, siendo otra alternativa a la hora de buscar recomendaciones de contenido o disponer de un hub en el que acceder a nuestras aplicaciones. Puede parecer algo confuso e innecesario el hecho de que nos ofrezcan dos ‘menús principales’, aunque muchos se quedan con la frase de que “en la variedad está el gusto”.

RENDIMIENTO EN SOFTWARE POR DEBAJO DE LO ESPERADO

Si bien Android TV nos ofrece todo ese tipo de características, es una pena que a nivel de rendimiento en software no acompañe. Tal como ocurría en la Mi TV 4S y que debería de ser algo a solucionar cuanto antes, el rendimiento es algo pobre, encontrándonos en situaciones en las que la televisión simplemente no responde, o tarda demasiado en reaccionar. La multitarea no es ni por asomo una de sus virtudes, así que os recomendamos hacer un uso pausado de la televisión. En este modelo nos encontramos con el MediaTek 9611 como procesador, un avance respecto a su predecesor pero insuficiente. Es cierto que es sobre todo en procesador y tecnologías donde generalmente se recorta a la hora de ofrece un producto de gama media, pero creemos que obtener un dispositivo capaz de ser fluido en las acciones que realicemos sea lo mínimo a considerar. Antaño en los teléfonos móviles era una sensación bastante amarga, pero afortunadamente se ha ido corrigiendo. Esperemos que ese día llegue también a los televisores.

CONCLUSIÓN

En definitiva, La Xiaomi Mi TV P1 será la elección de muchos a la hora de decantarse por un televisor 4K económico y con grandes funciones. No es para menos, ya que nos encontramos con una buena calidad de imagen gracias a su panel y a la compatibilidad con contenidos HDR. No obstante, la compañía ha sacrificado ciertas decisiones en diseño y hardware para ofrecer un producto económico, algo esperable, aunque más notorio en este caso.