Saúl Craviotto: mirando a Tokio 2020

"Estoy mejor que nunca". Titular rotundo. Confianza plena en sí mismo. Escuchas a Saúl Craviotto y es inevitable preguntarse y preguntarle hasta donde puede llegar. A sus 35 años, se siente como un chaval, entrena “casi diez horas diarias y mi cuerpo responde muy bien a todo. Me siento genial”. Con Tokio en el horizonte -“aún debo clasificarme pero todo apunta a que allí estaré”-, todos le preguntan por esa posibilidad más que real de ser el abanderado de la delegación española. “Sería el tipo más feliz del mundo, por supuesto, pero vamos a esperar y a ir paso a paso. ¿Un orgullo? ¡Máximo!”, reconoce Saúl.

Pero hay algo que le motiva muchísimo más y es lograr “esa quinta medalla que tengo entre ceja y ceja. Sé que la puedo conseguir”. Contento, explica que “el equipo está super motivado. Entrenamos muy duro pero con mucha ilusión” y asegura que “a nivel mental, estoy a tope. La experiencia hace que estés preparado o no y, en mi caso, todo suma en mi cabeza. Tras una gran derrota, después ha llegado uno de mis mayores éxitos. Algunos se van abajo. Yo me vengo arriba”.

SIEMPRE CULÉ. Aunque la preparación de estos Juegos Olímpicos le tienen absorbido, Saúl Craviotto sigue pendiente de su Barça aunque sea a través de las redes sociales “o de mis compañeros de equipo y de Miguel, mi entrenador. Los culés somos mayoría pero la verdad es que últimamente hablamos poco del tema”.