"Aún podemos dar mucha guerra"

Atómikas con ‘K’. Eso, sobre todo. Bien de potencia ese ‘apellido’ con el que las conocen y admiran en todo el circuito.

En el Real Zaragoza Club de Tenis, su capitana las enseñó a entrenar a todas como hormigas, cada una haciendo su trabajo. Y cuando el novio de Mapi las vio jugar, tuvo claro que aquellas mellizas eran como las ‘Hormigas Atómicas’ de los dibujos animados.

Ese poderío, ese físico, esa agresividad, esa fuerza y ese no dar nada por perdido caracterizan a estas deportistas que son todo un espectáculo en la pista. “Tenemos treinta y seis años pero aún podemos dar mucha guerra -asegura Majo-.

Aunque la lesión de Mapi fue un golpe duro, estamos ya en el camino y creemos que aún nos queda mucho por jugar y por ganar”.

El pádel profesional llegó “más tarde de lo que suele ser habitual. En 2010 decidimos dejar nuestros respectivos trabajos e ir a por todas”, cuenta Mapi. Mellizas -que no gemelas-, han caminado juntas desde el primer día de su vida. “Perfectamente encajables”, comentan riendo.

En aquella familia de siete hermanos, ellas dos eran una. “Nos miramos y lo sabemos todo la una de la otra al instante”. Así lo demuestran en la pista, con una complicidad abrumadora. “Los meses que Mapi ha estado de baja -explica Majo- tuve que adaptarme a una nueva pareja, Delfi Brea. Aunque costó al principio adaptarme a otro tipo de juego y convivir con otra persona, me hizo crecer como jugadora y aprender”.

FUTBOLERAS Y MUY CULÉS

Aunque su Real Zaragoza “nos hace sufrir” nunca dejarán de lado a su primer equipo del alma.

El segundo es el Barça, con Carles Puyol “como referente absoluto”, que también las ha tenido en vilo “con la situación de Messi”.

Majo entiende, “aunque me duela, que el jugador quisiera marcharse pero debió hacer las cosas de otro modo”. Su hermana cree que “hubo una mala gestión de la directiva con él.

No se merecía una salida así. ¿Que al final se queda? Puede jugar en su contra pero si recupera las ganas y la ambición, es el mejor del mundo”. Ambas creen que “el 8-2 hizo mucho daño, pero tanto Messi como el Barça son mucho más que un resultado. No eres el peor cuando pierdes ni el mejor cuando ganas. Esto es una carrera de fondo”.

No te pierdas la edición completa de Sport&Style.