Una Liga menos en Canarias

Con el billete en el bolsillo para los cuartos de la Champions, el Real Madrid vuelve a la competición doméstica donde Zidane puede hacer experimentos visto que la Liga es un objetivo menos, por inalcanzable, como lo es que en Canarias haya una hora menos que en la Península. El francés asiste a dos versiones diferentes de su equipo, en la Liga deambula sin rumbo y en Europa ve brotes verdes en el ánimo y compromiso de unos futbolistas que quieren deshacerse del cartel de fracaso que llevan colgado desde que ganaron el Mundialito de clubes hace 14 meses. 

DEBILIDADES

 Hoy toca visitar Las Palmas y si las estadísticas fueran una ciencia en fútbol, tendría asegurado el empate que es la constante desde que Zizou dirige a los blancos cuando juegan a domicilio: empate (Betis), triunfo (Granada), empate (Málaga), triunfo (Levante)… La Unión es un equipo diferente, creativo, irregular, incisivo, vistoso e impredecible. Los canarios luchan por la permanencia –están a cuatro puntos–, y aunque el Madrid no es un rival de su Liga, sabe que los madridistas son vulnerables como vienen demostrando toda la temporada. Quique Setién lo explicó clarito tomando como referencia el último partido de los blancos: “La Roma perdió, pero le hizo cuatro o cinco mano a mano contra el portero. Tenemos que aprovechar esas debilidades”.

Para los equipos españoles las debilidades blancas son un secreto a voces. Escasa competitividad cuando le aprietas, apuros para montar su juego si le presionas y vulnerabilidad defensiva por falta de compromiso de sus jugadores. Los rivales saben que si van a buscarle sufre y da lo mismo que juegue Modric, Kovacic o Casemiro que los de arriba se desentienden de los de abajo.

Zidane intenta arrancar ese compromiso que Ancelotti consiguió a medias y que para Benítez fue como chocar contra un muro por su falta de empatía. El francés tiene a toda la plantilla excepto Benzema, y salvo Keylor y Cristiano, puede alinear a cualquiera menos a Kroos, James y Danilo que los dejó en Madrid. Tras el encuentro ante la Roma, es el turno de Varane, Carvajal e Isco. Bale, Ramos, Marcelo y Modric apuntan también al once. Quedarían dos puestos por decidir que estaría entre Lucas Vázquez, Jesé por jugar en su tierra, y Casemiro. Setién también tiene algunas dudas, especialmente en el centro del campo, donde recupera a Roque Mesa, pero duda si poner a Momo y está pendiente de recuperar a Tana.