Real Madrid

El ocaso de la BBC del Real Madrid

La capacidad futbolística y goleadora del tridente Bale-Benzema-Cristiano no es suficiente y perjudica defensivamente a un Real Madrid que está repleto de jugones

No está siendo el año de Bale y Cristiano Ronaldo

No está siendo el año de Bale y Cristiano Ronaldo / sport

Alejandro Alcázar

Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, reunió a tres de los mejores delanteros del mundo en el verano del 2013. Cristiano Ronaldo, Karim Benzema y Gareth Bale concatenaban tres estilos diferentes para formar la famosa BBC y arrasar con las defensas rivales. Era difícil conjugar a los tres en ataque pero la ‘mano blanda’ de Carlos Ancelotti supo exprimir sus condiciones pese a que Bale jugó fuera de su zona natural y el riesgo de que los tres juntos desequilibraban al equipo. La primera temporada estuvo repleta de luces ganando la Copa y la Champions con sus tres estrellas como principales tenores. El madridismo se ilusionó con un futuro esplendoroso por su tridente imparable. Pero fue un espejismo porque a partir de enero de este año el declive futbolístico del equipo señala a la tripleta como el principal cáncer a extirpar. Los tres juntos desequilibran al equipo ante su afán egoísta de jugar sólo cuando recuperan el balón. A eso se suma que no mezcla, Cristiano y Bale son agua y aceite, y Benzema junto a ellos parte al equipo en dos.  

Falta de empatía 

El fútbol es generoso con el talento pero castiga el egoísmo y a la BBC le sobra lo segundo. Como futbolistas lo tienen todo, pero falta empatía entre ellos, justo la que le sobra a la MSN de Messi, Suárez y Neymar, amigos, colegas de profesión y felices, e incluso comparten vida familiar. La BBC es otra cosa. Cristiano impone su ego a gol limpio e incluso amenaza con retirar la palabra a todo compañero que no le califique como el mejor del mundo. Benzema se lleva bien con los dos pero sin profundizar, y vive en su mundo de Hip-hop, coches y escándalos. Mientras que Bale parece que sigue residiendo en gales con su familia, sin integrarse en el grupo, en el campo ni en el país en el que vive. Para más cizaña, tiene un agente que vela por sus interes y exige donde tiene que jugar, cómo y cuándo. Esta es la famosa BBC que pese a llevar dos años y medio junta no se compenetran, cada día se alejan más entre ellos y del juego de equipo.

El Madrid ha jugado 22 partidos esta temporada, ha perdido tres y dos con la BBC pese a que sólo han coincidido en seis por culpa de las lesiones. El Barça les pintó la cara –0-4 en el Bernabéu– y el Villarreal se aprovechó de su desidia e indolencia defensiva para jugar a sus anchas y construir su triunfo en el primer tiempo. Benítez lo intenta, pero ni se aplican ni se implican y empieza a barruntar que está perdiendo el tiempo para que defiendan en un intento de equilibrar el equipo. 

Cristiano lo juega todo pese a esa lesión crónica en el tendón rotuliano y que pasa de los 30. Acumula 1.710 minutos entre el Madrid y su selección. No se pierde ni los partidos en el jacuzzi. Para él debe ser fácil aguantar al ritmo que juega. Solo corre con balón y para marcar goles, porque defender ni va con él ni da la gloria. Bale sigue sin integrarse pero lo tiene más difícil porque nunca ha jugado en su sitio. Es cierto que lo intenta, que se esfuerza pero no se implica como centrocampista. Quiere ser como Cristiano y le copia. Benzema es otra cosa. Vive en su mundo. Por quejar ni se queja de las patadas de los defensas. Le gusta combinar, jugar y hacer buenos a los que le rodean. 

No conectan 

Es el ocaso de la BBC y no por su capacidad futbolística, sino porque los tres juntos no funcionan y perjudican a un equipo que por detrás está repleto de jugones. Su presencia hipoteca el fútbol del Madrid por no implicarse en defensa y anteponen su egoísmo personal para recolectar flashes y titulares. Una mezcla que no funciona pese a actuaciones espectaculares que se cuentan con los dedos. En la primera temporada el 1-6 al Schalke,  el 0-4 al Bayern, la final de Copa ante el Barça y de la Champions ante el Atlético. La temporada pasada ganaron la Supercopa de Europa al Sevilla y el Mundialito al San Lorenzo, y solo brillaron en el 0-3 al Liverpool y el 3-1 en Liga al Barça. Ocho actuaciones estelares sobre casi 140 partidos. Muy poco para su capacidad que devalúa su elevadísimo caché.