Isco vive la pesadilla de un viaje al pasado

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Isco Alarcón, jugador del Real Madrid, está lesionado por problemas en una cadera. Toca fondo de una trayectoria que ha ido de más a menos desde el año pasado por estas fechas, cuando irrumpió con fuerza en el once titular. Fue el revulsivo incuestionable de un equipo al que dio equilibrio y dotó de magia con su fútbol ‘picassiano’ para asumir un papel reservado solo a jugadores talentosos. Un final de temporada brillante que enganchó con un principio de campaña soberbio, para ir diluyéndose poco a poco bajando sus prestaciones. Con la recuperación de la BBC, que llevaba nueve meses sin reunirse por culpa de las lesiones, el rol del malagueño vuelve a ser el banquillo, el del jugador número doce, compartido con Nacho, algo que le llevó hace un año a plantearse su futuro.

Isco ante la pesadilla de un viaje al pasado, al sitio donde estaba y que tanto le atormentaba. Su situación llegó a ser muy difícil, hasta el punto de amenazar con irse. “Entreno para jugar. Si al final de temporada tengo pocos minutos, me buscaré alguna opción para el futuro”, soltó en el ‘El Partidazo’ de la Cope a finales del 2016. La proximidad del Mundial y su paso atrás le empieza a angustiar, pero no sólo a él, también a Lopetegui: “Seguro que vuelven a jugar, pero me preocupan que Asensio e Isco jueguen poco”. Zidane no negocia la titularidad de la BBC por mucho que públicamente diga que Isco “siempre va a tener un papel importante”. El centrocampista ya lo vivió y lo último que espera es volver al mismo sitio en el que estaba.

LA AMENAZA DE HAZARD

Pero su situación podría ir a peor si el Real Madrid ficha a Eden Hazard el próximo verano. El fenómeno belga se mueve por la misma posición que él y aunque decir que son incompatibles sería demasiado arriesgado, si supone una competencia directa para el malagueño. Sobre todo si la BBC sigue en el equipo, si no traspasan a ninguno de sus componentes, y si Zidane se mantiene en su puesto. El francés siente debilidad por Hazard, un fichaje que considera prioritario. Su presunto aterrizaje complicaría aún más las opciones de jugar del malagueño, que se plantearía seriamente abandonar el equipo. Eso sí, como con Cristiano Ronaldo, el asa de la sartén la tendría bien sujeta el Real Madrid ya que Isco tiene contrato hasta el 2022 y una cláusula prohibitiva de 700 millones de euros.