El pluriempleo de Uri Santos y Albert Cardona

Los dos jugadores del Industrias Santa Coloma combinan sus tareas en la elite del fútbol sala con la organización de torneos de pádel

Empezaron organizando una competición con amigos durante la pandemia y ahora ya llevan más de 40 torneos organizados

Albert Cardona y Uri Santos

Albert Cardona y Uri Santos / Valentí Enrich

Àlex Masana

Uri Santos y Albert Cardona son de esos deportistas que salen del maldito estereotipo que les hemos encasquetado a los que practican deporte de manera profesional. Son figuras importantes del vestuario del Industrias Santa Coloma de la primera división del fútbol sala, el decano de la Liga. Y también tienen sus inquietudes fuera de las pistas. Uri estudió periodismo e hizo un máster en organización de eventos, Albert hizo la carrera de dirección de empresas. El fútbol sala y la etapa en el Barça les unió, el paso por el club de Santa Coloma de Gramenet ha consolidado la amistad y ahora un negocio juntos hace que sean uña y carne. Inseparables. The Spheric Group es la marca bajo la cual Uri Santos y Albert Cardona, lejos del foco de la profesionalidad del fútbol sala, se abren camino en el mundo del pádel. “Nuestra propuesta se basa en un circuito de varios torneos al año, que se disputan en un solo día, que no son federados y que buscan crear un ambiente festivo, de buen rollo, con música y que la gente se lo pase en grande”, cuenta Cardona.

La relación entre Uri y ‘Pirata’, así es como se le conoce a Albert, con el pádel era de meros espectadores. Seguían la actualidad y estaban al día pero nunca habían tenido un contacto estrecho con el mundo de la pala y la pelota amarilla. “Con Javi Rodríguez de entrenador, algún entreno habíamos hecho en la pista de pádel. Para reforzar el grupo y salir un poco de la rutina”, recuerda Uri Santos. “Y con amigos, en verano, también echamos algún partido. Hay alguno del equipo que le gusta mucho el pádel”, advierte Albert. La pandemia del coronavirus y el boom definitivo que pegó el pádel acercó a los dos jugadores a este deporte. “Habíamos montado un primer torneo de fútbol sala con amigos antes de la pandemia. Lo aparcamos. Y cuando se empezaron a relajar las restricciones probamos con el pádel montando un torneo con amigos. Y funcionó”, relata Cardona. “Los grandes circuitos de torneos estaban parados, tampoco se jugaban los torneos federados y el boca a boca hizo que se hiciera grande”, añade Uri Santos. 

Poco a poco, los torneos de The Spheric Group se fueron haciendo grandes, los números de parejas participantes aumentaron y se creó un circuito que trabaja una decena de torneos al año. Ya han organizado más de 40 desde el primero que se jugó durante la pandemia del coronavirus. “Aunque, seguramente, no esperábamos llegar donde estamos ni hacerlo tan grande como se ha hecho… queremos seguir creciendo”, comentan los dos. “Ahora mismo, los torneos solo los organizamos para la gente de Barcelona. Se juegan en la zona de Barcelona. Y las únicas excepciones, son los que montamos en la Costa Brava y en la Cerdanya. Nos gustaría salir de Catalunya y probar suerte en Madrid y en Menorca. Nos hace mucha ilusión”, explica Uri. “Lo tenemos que preparar poco a poco para ver si no puede ir bien”, añade.

Además, la expansión de The Spheric Group en el Vallés la quieren hacer a través de una marca que tendrá el nombre de Smash Padel Cup. “El pádel se juega mucho en Sabadell, Terrassa, Sant Cugat y queremos crecer allí a través de este nombre. Será la marca hermana pequeña de The Spheric”, comentan. “Poco a poco, hemos ido delegando con un equipo de gente que nos ayuda para así poder compatibilizarlo todo con nuestras obligaciones con el club. Al principio queríamos estar en todos los torneos pero por horarios era imposible. No podíamos estar en el club de pádel el sábado y jugar en Madrid o en Sevilla el mismo día”, explica “Pirata”, que es quien se encarga de hacer los cuadros. “Es jodido porqué queremos mantener la esencia familiar del principio y que todo el mundo pueda encajar. No siempre podemos”, explica Cardona, que recuerda que en el último torneo de la Costa Brava en el Pádel Gualta se juntaron 140 parejas entre todas las categorías. 

Ambos son jugadores indispensables para los esquemas de Xavi Closas, el entrenador del Industrias Santa Coloma, en este segundo año de proyecto. Dentro de la pista, Uri Santos es un cierre elegante, con visión de juego y con grandes capacidades técnicas y tácticas. Albert Cardona es un ala potente, con gol, con recorrido, con regate y con una pegada espectacular con la pierna izquierda. Su juego encaja con sus jugadores favoritos del circuito. “A mi me gusta Momo González. Tiene mucha calidad”, sonríe Uri Santos. “Me gusta más Arturo Coello. Pegador potente, como yo”, contrarresta Cardona con una carcajada. Ambos siguen el circuito durante la semana y están al día. “El jugador de élite de nuestro deporte entrena tres horas al día. Te queda mucho tiempo para poder hacer reuniones, organizar cuadros o trabajar en otras cosas”, considera Cardona, que también dirige un negocio de restauración con otro socio. 

Y... ¿El pádel y el fútbol sala tiene mucho que ver?: “Yo creo que se parecen en pocas cosas. Son deportes rápidos, que se juegan en espacios pequeños y que requieren reflejos. Y también que, seguramente, son hermanos pequeños de deportes como el fútbol y el tenis”, analiza Uri. 

Seguramente, el crecimiento de uno y otro no ha sido el mismo. Ni por asomo. “El fútbol sala se ha estancado y el pádel no para de crecer. Lo ves a simple vista. El pádel mueve a mucha gente, se quiere expandir, se quiere innovar, mueve a muchas empresas y esto es el motor de muchas cosas. Por desgracia, el fútbol sala no interesa tanto”, analiza Uri Santos. Lo que empezó con un torneo de amigos encima de una pista de fútbol sala con césped artificial ha mutado a un circuito social de pádel con torneos de un día que gusta al público. Es una de las ocupaciones de dos jugadores profesionales de fútbol sala, Albert Cardona y Uri Santos, pluriempleados. “Lo que hemos hecho con The Spheric Group y lo que queremos crecer era imposible hacerlo con el fútbol sala”, sentencian. Que sea por muchos años de compaginar su pasión y su nueva afición.