Xavi es valiente y tiene las ideas muy claras

Xavi habló cara a cara con Piqué

Xavi habló cara a cara con Piqué / SPORT.es

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

Xavi es valiente. Y tiene las ideas muy claras. Ha venido al Barça a construir un equipo campeón. Y es consciente de que, si no gana títulos, su carrera en el banquillo del Camp Nou será corta. Por eso ha exigido a Laporta fichajes que suban el nivel de la plantilla. Azpilicueta, Koundé, Christensen, Marcos Alonso, Ruben Neves, Kessié, Bernardo Silva, Raphinha y Lewandowski son los futbolistas que el técnico quiere para su nuevo proyecto...

Pero Xavi ha pedido, también, una drástica limpieza del vestuario. Y no le ha temblado el pulso a la hora de hacer una larga lista de bajas. Una lista en la que está Piqué. El entrenador no cuenta con el central para la próxima temporada. Y así se lo expuso en una dura reunión que mantuvieron hace dos semanas. Xavi le explicó al capitán los motivos de su decisión y fue rotundo en sus argumentos: duda de su condición física (después de haberse abandonado durante demasiados años) y cuestiona su comportamiento fuera de los terrenos de juego.

El técnico no cree que Piqué pueda aguantar el exigente ritmo que deberá afrontar el Barça si quiere ser un equipo competitivo. Esta campaña, por ejemplo, se quedó fuera por lesión en el mes y medio más decisivo del campeonato. Aunque lo que más preocupa a Xavi es la actividad ‘extradeportiva’ del central: demasiados negocios y demasiadas polémicas que le hacen perder concentración. Xavi fue muy explícito con Piqué: lo mejor sería que se fuera. Y que se fuera, además, como un héroe, renunciando a su contrato como hizo el mítico Carles Puyol.

Sin embargo, Piqué no quiere irse. Le replicó a Xavi todos sus argumentos, le prometió hacer propósito de enmienda y le aseguró que ofrecería su mejor versión. Además, su salida es extremadamente complicada: le quedan dos años de contrato y con una mochila de salarios aplazados de casi 40 millones de euros. Está en manos de Mateu Alemany, que ejerce de negociador, convencerle de que lo mejor para él es una despedida digna. Pero se antoja difícil. Casi imposible.

Por eso Xavi ya tiene asumida, muy a su pesar, la continuidad de Piqué. Aunque su cumbre, como mínimo, habrá servido para que el central se ponga las pilas (demasiado tarde) y se sienta presionado para aceptar una nueva rebaja salarial. Y para que los otros veteranos capitanes (Busquets y Alba) comprueben que el entrenador ya no se casa con nadie...