Por qué el madridismo detesta a Julen Lopetegui

Julen Lopetegui está cuestionado en el Real Madrid

Julen Lopetegui está cuestionado en el Real Madrid / EFE

Ernest Folch

Ernest Folch

Lopetegui se tambalea, y no hay mejor prueba de su fragilidad que los mensajes fúnebres que llegan del entorno presidencial. La historia de amor con el técnico vasco ha durado apenas tres meses y si no llega a ser por el empate del Barça quizás hoy ya no sería entrenador del Real Madrid.

Es cierto que en el club blanco, donde para lo bueno y para lo malo solo vale el último resultado, es casi imposible construir nada sin un marcador favorable. Pero aun así, la decepción con Lopetegui progresa a tal velocidad que indica que sucede algo más profundo que supera los meros tropiezos deportivos: el Real Madrid está vivo en la Champions, a un solo punto del Barça en la Liga y opta a ganar todas las competiciones.

Entonces, ¿qué sucede? Primero, que la crisis goleadora señala directamente al presidente (al que se le escapó Cristiano sin dar con la tecla del sustituto) y no hay otra forma de protegerlo que atacar al entrenador. Y segundo, que Lopetegui irrita sobre todo por el estilo de juego. Y es que de repente el madridismo tiene que aguantar en su propio estadio que el equipo juegue al denostado tiqui-taca, el anticristo que les recuerda a la época de Guardiola en la que el Real Madrid era humillado regularmente por el mejor equipo del mundo con unos rondos que ya son historia del fútbol.

Como una reacción al vapuleo que sufrió entonces el Real Madrid, el entorno blanco inoculó un odio visceral al juego que les dejó en evidencia, y fue entonces cuando el mourinhismo se bunquerizó en una ridícula guerra de guerrillas contra el juego del Barça en un momento en que justamente era celebrado en todo el mundo. El colmo de los colmos ha sido que Lopetegui ha recuperado un estilo que en realidad es el opuesto al que pide el ADN blanco. Si quieren saber por qué el madridismo ha pasado en tiempo récord de quererlo a detestarlo, no miren el marcador. Miren el juego. Qué cosas tiene el fútbol.