"No te fíes nunca de un avstemio"

La UEFA no usará el VAR esta temporada en la Champions. Ceferin, presidente del organismo, argumenta su decisión en que estas cosas hay que hacerlas bien, que no han tenido tiempo para ello y que el año que viene ya veremos. Que se lo pensará. Tampoco habrá vídeoarbitraje en la Premier, aunque, en este caso, así lo decidieron los clubs que forman la competición votando. Todo lo contrario de lo que planteó la ECA (la mayoría de clubs europeos) en su Asamblea General celebrada el martes en Split (Croacia). Quieren el VAR “lo antes posible”, dijo Andrea Agnelli, su presidente. 

La resistencia de Ceferin es, por lo menos, extraña porque el sistema demostró en el Mundial que hace del fútbol un deporte más justo y, en consecuencia, convierte en menos justas aquellas competiciones en las que no se utiliza. Como la Champions. Hasta un niño de cuna podría deducir que si el VAR no forma parte del torneo más importante de clubs en Europa no se debe a la falta de tiempo o de, muchísimo menos, dinero, algo que también llegó a insinuarse. La negativa es incomprensible desde cualquier óptica porque un error grave no revisado puede acarrear una eliminación injusta y partir la competición en dos: la que será y la que tuvo que ser. Dos Champions disputándose en paralelo, una barbaridad deportiva que podría deslegitimar (como así debería haber sido con el Real Madrid las dos últimas temporadas, siendo generosos) al campeón. A no ser que, precisamente, la inexistencia del VAR sea cosa de alguien que decide, voluntariamente, no vever. Y alguien ya lo dijo: “No te fíes nunca de un avstemio”.