Barça-Madrid, dos polos opuestos que se cruzan en el rush final

12 jornadas La historia no invita al optimismo. Los precedentes nos dicen que esta jornada no es propicia para que se produzca un vuelco en la clasificación y el Barcelona pueda recuperar el liderato que dejó escapar en el Santiago Bernabéu. Habrá otros momentos pero este no lo parece. Y no porque el Barcelona no gane a la Real Sociedad sino porque es complicado que el Madrid caiga en el Benito Villamarín. Vayamos por partes.

El Barça ni se acuerda la última vez que dejó escapar algún punto en el partido contra la Real Sociedad. Jugadores como Lenglet, Arthur, Junior, De Jong, Fati, Collado o Puig no habían nacido en abril de 94 cuando el Barça de Cruyff dejó volar dos puntos (1-1) del Camp Nou. Desde entonces, solo se han contabilizado victorias para los azulgranas. Un registro impresionante que casi garantiza un nuevo triunfo, aunque los partidos hay que jugarlos.

El caso del Madrid

Sin ser tan flagrante, el Madrid pisa terreno favorable cada vez que viaja a Sevilla y se enfrenta al Betis. El balance también es para quitar el hipo. Cinco victorias consecutivas blancas en las últimas cinco temporadas y solo dos derrotas en los que va de siglo XXI. Otra vez, si miramos los precedentes, el Madrid tiene viento a favor.

Dicho esto, ni los de Zidane ni los de Setién están para tirar cohetes y llegan justos de fuerzas en este rush final de la temporada. El Madrid sufre para marcar goles pero aguanta muy bien atrás (ha encajado solo 17 goles por 31 el Barcelona siendo el equipo menos goleado de la Liga, incluso menos que el Atlético (19)). Sin ir camino de record, el Barça tiene pegada (el mejor de la liga con 62 tantos) pero atrás vive una de sus peores temporadas. Son dos polos opuestos de los cuales ninguno de los dos invita al optimismo desmesurado. Todo se coge con pinzas porque nadie pone las manos en el fuego por su equipo. Es por ello que todo está más abierto que nunca.