LeBron James quiere devolver los Lakers a la cima

Si una franquicia de la NBA espera con expectación el inicio de la temporada 2018-19, son los 'nuevos' Angeles Lakers, con su estrella recién llegada a la ciudad de Los Ángeles, LeBron James.

Después de una larga travesía por el desierto desde la marcha de Kobe Bryant y Pau Gasol, el cuadro angelino parece haber recuperado la sonrisa con el fichaje del jugador más determinante de la NBA, y que debe devolver los Lakers a lo más alto de la Liga. Aunque quizá no tan deprisa como quisieran.

Tras un record el año pasado de 35 victorias por 47 derrotas, el plan de la dirección deportiva con Magic Johnson al frente, era hacer crecer algunos jugadores que han de resultar decisivos en los próximos años, como Lonzo Ball, Kyle Kuzma o Brandon Ingram.

Expectativas muy altas

Un año de experiencia ha sido bueno para todos ellos, pero con la llegada de LeBron, las expectativas se han disparado, y el equipo debe realizar un salto de calidad sustancial. No solo por los jugadores de futuro.

También han realizado incorporaciones para relanzar el equipo esta misma temporada como Rajon Rondo, Lance Stephenson, JaVale McGee, o Michael Beasley y los rookies Oritz Wagner y Sviatoslav Mykhailiuk. Han perdido una de las piezas que debían ser importantes, como Julius Randle, pero mantener tanto talento sin ceder en algún traspaso, era imposible.

Tras el fichaje de LeBron por cuatro temporadas, estos Lakers están listos para levantar el vuelo. El primer objetivo es regresar a los play-offs, algo que parece casi garantizado con el mejor jugador de la NBA en sus filas. Pero después, ¿qué?

a la espera de ayuda

Es cierto que los grandes jugadores de la historia de la NBA convirtieron a sus equipos en inmediatos contendientes al título, aunque esperar eso de LeBron el primer año, se antoja complicado. Todo proceso de formación de un equipo ganador lleva su tiempo.

Por ello, y  conscientes de que LeBron necesita otro crack a su lado, están preparando el terreno para que el próximo verano aterrice en la franquicia el jugador que debe ayudar a LeBron a entrar en la lucha por el anillo.

Lo que nadie discute es que James devolverá el espectáculo a Los Ángeles, y que sus números de MVP el último año, -27 puntos, 8,6 rebotes, 9,1 asistencias en 37 minutos de juego, garantizan tantas victorias como ilusión por volver a reinar en la NBA en un futuro muy cercano.