FC BARCELONA - MUNDIAL DE CLUBES

Paulinho, el fichaje imposible de Sandro Rosell

El presidente blaugrana quiso contratar el ahora futbolista Guangzhou Evergrande en junio de 2013, pero el volante ya había firmado por el Tottenham

Paulinho, el fichaje imposible de Sandro Rosell

Paulinho, el fichaje imposible de Sandro Rosell / sport

Joaquim Piera |Sao Paulo

En junio 2013 Paulinho Ralf formaban el doble pivote más celebre del fútbol brasileño. Lo habían conquistado todo con el Corinthians dirigido por Tite: la Liga (2011), la anhelada Copa Libertadores (2012), el inolvidable Mundial de Clubes (2012) ante el Chelsea de Rafa Benítez y el Campeonato Paulista (2013) contra el Santos FC de Neymar Jr.

Luiz Felipe Scolari lo convirtió en un intocable en la Seleçao. Su Copa de las Confederaciones 2013 fue tan impresionante que ganó el Balón de Bronce (el de Plata fue para Andrés Iniesta, y el oro para Ney). Sus actuaciones llamaron la atención al Barcelona. Sandro Rosell, que hacía menos de un mes que había cerrado la contratación de Neymar Jr, empezó a mover los hilos… pero esta vez llegó tarde en un mercado, como el brasileño, que dominaba al dedillo.

Sandro escuchó que el jugador ya había firmado por el Tottenham, que desembolsaría 20 millones de euros. El futbolista ya había sido ofrecido, pero los técnicos no veían clara su contratación y tenían dudas sobre su adaptación. Aquel fue el ápice de la carrera del volante. No cuajó en la Premier y acabó siendo suplente en su primera temporada. Su Mundial fue más que discreto, siendo una sombra de aquel todoterreno que eclipsó al mismísimo Neymar en la final del Campeonato Paulista 2013.

Mauricio Pochettino llegó al banquillo de los Spurs en 2014 y con ello el ostracismo del brasileño. En junio de este año, Felipao, que acababa de firmar con el Guangzhou Evergrande, lo llamó a filas, donde se mantiene aún invicto. El club chino pagó 13 millones de euros de traspaso. Ganó la Champions asiática y un gol suyo en el descuento selló el pase a les semifinales del Mundial de Clubes y la opción de enfrentarse por primera vez en su carrera con el club por el que pudo fichar dos años cuando era el mejor centrocampista de su país.